La Fiscalía General de la República (FGR) ha concluido la investigación en torno al asesinato de los sacerdotes jesuitas y dos trabajadoras de la UCA, en noviembre de 1989, según reveló esta mañana el fiscal general, Rodolfo Delgado.
En entrevista de televisión, el funcionario añadió que toda la documentación ha sido presentada ante el juez de Instrucción y que la Fiscalía pedirá que el caso pase a la etapa de juicio. «La @FGR_SV ya concluyó con la investigación. Fueron presentadas todas las evidencias ante el juez de instrucción y estamos solicitando que el caso pase a la etapa de juicio», dijo.
Dentro de las investigaciones, la institución logró evidenciar que el asesinato de los religiosos fue planificado al interior del Estado Mayor con conocimiento y autorización del entonces presidente de la República, Alfredo Cristiani. «Estamos en una situación en donde hemos logrado establecer que la masacre fue planificada al interior del estado mayor», afirmó.
«Han transcurrido 35 años donde lo que ha ocurrido es un remedo de proceso y que solo se buscó que alguien pagara por esos asesinatos, para tratar de lavar la imagen de quien fue el autor intelectual», dijo.
La Fiscalía presentó el pasado 5 de junio, una acusación penal en contra de ocho personas, entre ellas el expresidente Cristiani (1989-1994), por la muerte de seis sacerdotes jesuitas y dos de sus colaboradoras.
La Fiscalía dice que cuenta con varios testigos que relatan y ubican al exmandatario en la reunión en la que se habría tomado la decisión de asesinarlos. “Él estuvo de acuerdo o autorizó los hechos que desencadenaron esa muerte”, aseguró el ministerio público.
En marzo del año pasado un tribunal de paz giró giró una orden de captura contra el exmandatario por este crimen de lesa humanidad, sin embargo, Cristiani rechazó la acusación y a su vez acusó a la Fiscalía de haber iniciado en su contra una persecución judicial «viciada de irregularidades».
“La verdad es que nunca supe de los planes que tenían para cometer esos asesinatos. Nunca me informaron ni me pidieron autorización porque sabían que jamás hubiera autorizado que se hiciera daño al padre Ellacuría o a sus hermanos”, se defendió Cristiani en un comunicado emitido hace un año.
Sin embargo, la Fiscalía dice que la investigación ha determinado que el expresidente y el padre Ignacio Ellacuría, entonces rector de la UCA, sostuvieron varias llamadas previo a la masacre., y que Cristiani le decía al religioso que no había de qué preocuparse, que permaneciera «tranquilo» en la Universidad, que no le pasaría nada.
Por la madrugada del 16 de noviembre, soldados del batallón Atlacatl simulando ser guerrilleros del FMLN, ingresaron a la UCA, reunieron a los religiosos en uno de los jardines y allí les dieron muerte.
Otra cortina de humo, de que quieren desviar la atención esta vez ?
Cada Religioso Habla dela Biblia al Tono que le Combiene…. Digan La historia completa con todos los actores. En que pasos andaban Los Jesuitas,que sabian Los militares de ellos para matarlos. Sea Bueno o malo el pueblo debe saber toda la verdad.