Cada mes las cifras de empleo formal reportado al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) son controvertidas. Cada quien, según su interés, analiza diferentes perspectivas y en no pocas ocasiones se toman cifras que no corresponden a las publicadas oficialmente por la institución. Esta vez no será la excepción; sin embargo considero oportuno presentar, antes que se tergiversen, la información recién publicada en el sitio web del Seguro, que brinda los registros del ISSS de abril.
La primera aclaración necesaria es por qué se presentan los datos dos meses después; para el caso, en junio (fecha del reporte) los datos de abril. Según los artículos 48 y 49 del Reglamento del Régimen de Aplicación de la Ley del ISSS, todo empleador debe reportar mensualmente las planillas de cotización en los 5 días hábiles del siguiente mes y cancelarla los últimos 8 días hábiles de ese mismo mes, es decir el marco normativo separa dos momentos específicos, uno correspondiente al reporte de la planilla y otro al pago de lo reportado. Es usual, porque así lo permite la norma, que los empleadores reporten a los trabajadores pero no cancelen lo reportado, generando incluso que el trabajador se quede sin cobertura de seguridad social por periodos.
La población económicamente activa según la Encuesta de Hogares y Propósitos Múltiples es 2,989,385; la cobertura total del ISSS es de 1,746,058 cotizantes y beneficiarios y los trabajadores cotizantes son 839,476, correspondiendo al sector privado672,562y al sector público 166,914.
Sin embargo, como anunciamos, los 839,476 trabajadores no tienen empleadores que cotizan en tiempo por ellos según lo regula el Reglamento referido; es decir, hay un grupo de trabajadores a quienes sus patronos les vulneran sus derechos al no cumplir cabalmente en el plazo establecido con su obligación de aportar y pagar lo que ya les descontaron.
Es importante señalar que a pesar de que hoy existen 672,562 trabajadores en el sector privado solo a 17,094 (equivalente al 2.54%) no les fueron pagados sus aportes por los empleadores; mientras que en abril de 2017 de 664,034 trabajadores dejaron de ser cotizados en tiempo 30,897, lo que significa que 4.65% del total de trabajadores del ámbito privado resultaron desprotegidos.
En el sector público, este año se reportan menos empleados, no obstante la disminución de los patronos morosos, esencialmente alcaldías, es porcentualmente mucho menor. En abril de 2017 de 167,585 a 1,882 empleados públicos que representan el 1.12% no les cumplieron en tiempo y en abril de 2018 de 166,914 (671 trabajadores menos que el año anterior) solo sufrieron desprotección 513 que representan el 0.31% del sector. Esta disminución se debe en gran medida a dos estrategias implementadas por la administración del ISSS a través de la División de Aseguramiento, Recaudación y Beneficios Económicos (DARBE): la primera, el cobro inmediato de la planilla reciente no cancelada, evitando que envejezca la deuda y los trabajadores queden descubiertos; y la segunda, es el fortalecimiento de la relación con los empleadores, promoviendo acciones orientadas a fomentar la cultura de cumplimiento de obligaciones de la seguridad social bajo el lema “Un empleo sin seguridad social no es un empleo digno”. En conclusión los empleadores han mejorado en puntualidad, pero aún falta.
La diferencia numérica entre los trabajadores reportados y los cotizados se va acortando en la medida que los empleadores morosos se van poniendo al día. Por ello el dato más razonable para comparar el comportamiento de los empleos formales reportados al ISSS, no es el que corresponde al número de trabajadores a los que sus empleadores les cumplieron pagando las cotizaciones en tiempo -lo que depende de la observancia de una obligación económica que se ve imposibilitada de ejecutarse por diversos factores-, sino a aquellos que fueron reportados como empleados en su momento y por los que en algún momento tendrán que pagar.
Es así que para el mes de abril se mantiene una tendencia creciente de los trabajadores reportados al ISSS, evidenciándose una mejora en la actividad económica del país al alcanzar un crecimiento de 8,528 trabajadores en el sector privado (aun cuando el sector público reportó una disminución de 671 empleados); siendo los sectores de más aumento el de las industrias manufactureras, explotación de minas y canteras, y otras actividades industriales; la construcción, el comercio, restaurantes, hoteles y transporte; así como las actividades inmobiliarias.
No todo el empleo formal se reporta al ISSS, hay sectores como el magisterio, las Fuerzas Armadas, los trabajadores de CEL que no son incluidos por sus propias normas; pero es evidente que el comportamiento creciente es regular, eso es lo que demuestran los datos oficiales de la institución.
Ques es eso de mas o menes, no debe de haber intermedios, hay empleo o no hay empleo, …
Felicidades Ruth por explicarnos con datos y análisis sobre la realidad en el ISSS. Esto es lo que hace falta en todas los áreas y ámbitos del país, hablar objetivamente.
Realmente no saben como cotejar el aumento y disminución, cuentan como «nuevos» los de código de observación siete («7»), un dato irreal, porque se pone a discreción dentro de un mismo patrono que presenta varios correlativos, y la disminución con el «6», un retiro de una planilla primaria a una complementaria del mismo patrono. Suman planillas primarias más complementarias, aumentando el total de trabajadores, sin que sea lo debido. Les falto más investigación.