El presidente Nayib Bukele celebró la histórica reducción de homicidios en El Salvador, calificándola como “sin lugar a dudas, la mayor operación contra el crimen en la historia mundial”.
Las cifras respaldan su declaración: en la última década, la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes ha caído drásticamente, pasando de 103 en 2015 a solo 1.15 en 2025.
Los números evidencian un descenso sostenido desde la llegada de Bukele al poder en 2019. Ese año, la tasa era de 35.8 homicidios por cada 100.000 habitantes, pero con la implementación del plan Control Territorial y el régimen de excepción, el país experimentó una transformación sin precedentes.
En 2022, la cifra se redujo a 7.8, en 2023 descendió a 2.4, en 2024 se ubicó en 2.0 y en 2025 alcanzó su mínimo histórico con 1.15.