El ministro de Salud, Francisco Alabi, certificó a 20 médicos residentes de las especialidades de medicina interna y medicina pediátrica de siete hospitales escuelas del Ministerio de Salud, como un trabajo intersectorial, de los distintos ministerios y en todos los niveles de incidencia en el país.
«La malaria sigue generando cerca de 520,000 casos en América, anualmente, y esto evidentemente tiene posibilidades de letalidades. El Salvador logró un paso importante a escala internacional, en ser un país libre de malaria», explicó el ministro de Salud.
Según datos de la OPS/OMS, El Salvador ha cumplido tres años sin transmisión local, desde 2019 y se le certificó como libre de malaria en el 2021.
En 2022 y 2023 se han desarrollado talleres de capacitación en malaria grave dirigidos al personal sanitario. Durante este periodo se han hecho 75 talleres, en 137 establecimientos, entrenando a mil 250 trabajadores de salud. Además, en el presente año se está implementando la formación constante en el recurso humano.
Luego de la capacitación los establecimientos de salud serán dotados con kits para el tratamiento de la malaria grave y se les mostrará cómo deben ser utilizados mediante ejercicios prácticos.
La incorporación de esta enfermedad en el Sistema Integrado de Salud ayudará al personal de salud a tener presente esta enfermedad en el momento que se requiera una atención especializada.
El ministro destacó que el sistema de salud ha avanzado a pasos agigantados, “lo que nunca antes se había logrado, hoy no solo se está consolidando lo que se venía trabajando, sino que se está alcanzando hitos históricos”, reafirmó.
Comprado silencios, pagando sumisiones, amenazando disidencias, sometiendo profesionales, en medio de una crisis creciente por negligente ministro.