El juzgado 5º de Paz de San Salvador, decretó este viernes 18 de enero, una orden de detención en contra el expresidente de la República, Mauricio Funes; el experiodista costarricense Lafitte Fernández; y el exfiscal Balmore Escobar, acusados de haber divulgado un Reporte de Operaciones Sospechosas (ROS) del Departamento de Estado de los Estados Unidos, que contenía información sobre el desvío de diez millones de dólares del gobierno de Taiwán hacia las cuentas bancarias personales del expresidente Francisco Flores, ya fallecido.
De igual forma, el juez giró instrucción para que se emita una difusión roja que permita traer a los imputados a El Salvador para que respondan por las acusaciones. Funes se encuentra asilado en Nicaragua, Fernández reside en su país natal, y Escobar huye en los Estados Unidos.
El exfiscal Douglas Meléndez, el pasado 4 de enero -un día antes de abandonar el cargo-, acusó formal y penalmente a los señalados, por los delitos de revelación de hechos, actuaciones o de documentos secretos en perjuicio de la administración pública, tipificado en el artículo 324 del Código Penal.
Los $10 millones a los que se refiere el ROS servirían para las obras de reconstrucción en la colonia Las Colinas, de Santa Tecla, departamento de La Libertad, luego de los terremotos de enero y febrero de 2001.
El ROS, emitido por el Financial Crimes Enforcement Network (FinCEN), del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, fue revelado a finales de noviembre de 2013 por Funes en el programa “Conversando con el Presidente”.
Debido a haber hecho público el documento, en diciembre de 2014, Estados Unidos sancionó a El Salvador negándole información confidencial financiera.
El exmandatario reaccionó este viernes desde su asilo, y se defendió una vez más afirmando que el ROS no es un documento oficial del Estado salvadoreño, por lo que descartó que haya delito en haberlo divulgado.
«¿Cuál es el agravio que se le produjo a la administración de justicia en el país como para que su divulgación sea un delito?» cuestionó. Anteriormente, señaló que en todo caso, haberlo hecho público fue «una falta administrativa» y no un delito.
Por su parte, Fernández aceptó el pasado 7 de enero, haber denunciado y “ayudado a comunicar” que Flores recibió en una cuenta privada más de 10 millones del gobierno taiwanés, y dijo que participó en la revelación del hecho pues «su deber social es de informar», en cuanto a su labor periodística. “Se me acusa por denunciar una verdad probada, confesa y de un interés público del tamaño de la catedral”, se defendió.
En tanto, el abogado Escobar, no ha respondido aún a los señalamientos.
Paradojas de la justicia salvadoreña: la FGR persigue penalmente y se ensaña contra quiénes hicieron posible el destape de la corrupción del expresidente Flores y en cambio no procesa a dirigentes y empresarios de ARENA que se beneficiaron con el desvío de los fondos de Taiwán. pic.twitter.com/M4AoponCgk
— Mauricio Funes (@FunesCartagena) January 18, 2019
Parece que el nuevo fiscal general ya dio sus primeras órdenes y todo apunta a que será más de lo mismo, ahh viene del grupo que protege a los que han robado al pueblo, los que no quieren devolver lo robado, esperen que pronto también saldrá SACA de la cárcel, es más de lo mismo.
LO MAS RIDICULO, ES LA DIFUCION ROJA, QUE ORDENA EL JUES,ES SEGURO QUE UN ORGANISMO COMO,LA IMTERPOL, CUANDO ESTUDIE,LA CAUSA DE LA ACUSACION,NO VA PROCEDER, Y,UN JUES PATETICO,UNA ACUSACION SESGADA,REMANENTE DE POLLO CRUDO,UN SISTEMA DE JUSTICIA,PATAS ARRIBA QUE DA RISA,Y EL MAS FAVORECIDO, CON ESTA ACUSACION ES MAURICIO FUNES, LE SOBRAN ARGUMENTOS, PARA RECLAMAR, PERSECUCION POLITICA,Y FRCEPE,Y LA DIEGO DE OLGIN,.
Ya aburren…!!…. Siguen con la misma cantaleta…..!!