El Tribunal Quinto Contra el Crimen Organizado de San Salvador condenó a José Samuel López Alarcón, alias «Chiqui», a una pena de 20 años de prisión por el delito de extorsión agravada en perjuicio de dos víctimas. Adicionalmente, se le impusieron otros 20 años de prisión por ser colaborador activo de la pandilla 18 «Revolucionarios», con base de operaciones en la colonia Madre Tierra de Apopa.
Alias «Chiqui» se autodenominaba miembro de «la organización más grande de Apopa» y era el encargado de extorsionar a los comerciantes de la zona, imponiendo cuotas iniciales que oscilaban entre $300 y $1,000, a cambio de garantizar la seguridad de los empleados de los negocios. Posteriormente, estas cuotas se convertían en pagos mensuales fijos de entre $40 y $100 dólares.
Junto a él, fueron condenados Julio César Alfaro Montoya, alias «Tulio», y José Rafael Cañas Polanco, alias «Rafa», a 10 años de prisión por el delito de extorsión agravada y otros 20 años por el delito de agrupaciones ilícitas, en perjuicio de la paz pública. Ambos eran colaboradores activos de la estructura criminal 18R.