En lo que va del año se contabilizan más de 25,000 pruebas antidopaje, que representan un aumento del 90 % en comparación al año pasado.
El viceministro de Transporte, Nelson Reyes, informó que en similar periodo del año pasado contabilizaron un promedio de 13,000 pruebas a escala nacional.
Los controles permanentes han permitido un incremento en el número de personas arrestadas por el delito de conducción peligrosa. Este año, van 1,137 detenidos por esta causa. El año anterior a la misma fecha fueron 1,029, un 10.5 % adicional.
“Tenemos más conductores peligrosos que han sido detenidos, llevamos más de mil. Estamos modificando todos estos controles que nosotros hacemos para que se vuelvan más efectivos también, cambiando las horas. La gente generalmente piensa que solo a una hora se ponen o que en ciertos lugares los van a encontrar y estamos cambiando eso para que la gente no sepa ni a qué hora, ni cuándo y adónde”, explicó el funcionario.
El objetivo de estos controles que se despliegan a escala nacional es que se traduzcan en reducciones en el número de accidentes, lesionados y fallecidos.
Aunque la conducción peligrosa se posiciona como la séptima causa de siniestros viales, las autoridades permanecen firmes en eliminar todo tipo de comportamiento irresponsable que ponga en riesgo la vida de la población.
“A las personas que conducen bajo los efectos del alcohol no vamos a tener tolerancia, cero tolerancias ante eso”, enfatizó el viceministro.
Los conductores deben recordar que, según la ley de Tránsito, de resultar en una prueba antidoping con entre 50 y 100 miligramos por decilitro de alcohol en la sangre, la PNC impondrá una multa de $57.14 por considerarse una falta Muy Grave. Mientras que, si sobrepasa los 100 grados del alcohol, la persona, además, es arrestada y su vehículo será remitido.