Miley Cyrus logró llegar a un acuerdo con el autor del tema We Run Things, Michael May, quien acusó a la cantante estadounidense de plagio en la canción We Can’t Stop que lanzó en 2013 y con ello evitó pagar la cantidad de 300 millones de dólares.
Este sábado, después de varios meses de negociaciones, se informó que Cyrus alcanzó un acuerdo con Michael May, compositor de origen jamaicano, quien en el 2018 presentó una querella legal por considerar que partes de la letra eran prácticamente las mismas y que la ex de Liam Hemsworth retomó para su canción.
Los coros de los temas, que fueron las causales sobre las que se sustentó el caso, decían en la versión de Michael May: «corremos hacia las cosas, las cosas no corren hacia nosotros» mientras que en la de Cyrus dice: «corremos hacia las cosas, las cosas no funcionan».
De momento se desconoce la cantidad que la intérprete desembolsó para lograr el acuerdo en la corte de New York.