El músico de Guns ‘N’ Roses sufrió problemas cardíacos debido al consumo excesivo de alcohol y drogas durante años y admite que tiene suerte de seguir vivo y poder trabajar cuando se acerca su 60 cumpleaños en julio.
Según declaró al periódico The Sunday Times: «Me siento afortunado de estar aquí. El otro día recibí una carta de mi director de gira en la que me contaba una de las veces que casi morí en 2001. Así que me siento muy afortunado y creo que envejecer es un logro; la gente que se queja de su edad debería replanteárselo… Y así lo haré, orgulloso, mientras físicamente pueda».
A Slash le diagnosticaron una cardiomiopatía -una forma de insuficiencia cardíaca congestiva- cuando tenía unos 30 años, pero se recuperó tras someterse a una operación de implante en el corazón.
El rockero admitió que se lanzó a la vida de fiesta cuando saltó a la fama, pero terminó sintiéndose aún más aislado antes de dejar de beber en 2006.
Así lo indicó a la publicación: «Me metí de cabeza en todo. De fiesta en fiesta. Pero nadie hablaba nunca de lo que pasa cuando se acaba la gira y se acaba la adrenalina. Porque yo no tenía una vida real antes de esto. Yo era un niño, luego me metí en una banda. Así que cuando tuve un descanso, no sabía qué hacer. No quería salir y que me reconocieran. No es lo mío, aunque supongo que me habría acostado con más personas. Pero terminé consumiendo muchas drogas, drogas alienantes que te hacen sentir solo. Lo hice durante años y, finalmente, dejé de beber. Y luego me dediqué a la música. Me habla de forma positiva».
