Sean “Diddy” Combs se presentará por primera vez ante el juez que se espera presida el juicio del poderoso rapero por cargos de tráfico sexual .
Combs será llevado a la corte federal de Manhattan desde una cárcel de Brooklyn para comparecer el jueves por la tarde ante el juez Arun Subramanian.
Se espera que la audiencia dé como resultado la fijación de plazos para que los abogados de ambas partes presenten argumentos que establecerán los límites de un juicio que los abogados de Combs quieren que comience en abril o mayo. Los fiscales no han expresado una preferencia sobre cuándo podría celebrarse el juicio.
El juez fue asignado al caso después de que otro juez se recusara basándose en sus asociaciones pasadas con abogados en el caso.
Combs, de 54 años, se declaró inocente de los cargos presentados contra él el mes pasado, entre los que se incluyen los de asociación ilícita para cometer delitos y tráfico sexual, basados en acusaciones que se remontan a 2008.
Una acusación formal alega que Combs coaccionó y abusó de mujeres durante años con la ayuda de una red de asociados y empleados, mientras silenciaba a las víctimas mediante chantajes y actos violentos que incluían secuestros, incendios provocados y palizas físicas.
Sus abogados han estado intentando sin éxito que el fundador de Bad Boy Records sea liberado bajo fianza desde su arresto el 16 de septiembre.
Dos jueces han concluido que Combs es un peligro para la comunidad si es liberado. En una audiencia de fianza hace tres semanas, un juez rechazó una fianza de 50 millones de dólares, que incluía arresto domiciliario y vigilancia electrónica, tras concluir que Combs era una amenaza para manipular a los testigos y obstruir una investigación en curso.
En una apelación de las decisiones sobre la fianza ante el Segundo Tribunal de Apelaciones del Circuito de Estados Unidos, los abogados de Combs pidieron el martes a un panel de jueces que revirtiera las decisiones sobre la fianza, diciendo que el paquete de fianza propuesto «claramente le impediría representar un peligro para alguien o contactar a algún testigo».
Instaron al tribunal de apelaciones a rechazar las conclusiones de un juez de primera instancia que, según dijeron, había «respaldado la retórica exagerada del gobierno y ordenado la detención del Sr. Combs».
