Las alegaciones en contra del actor y humorista Russell Brand van en aumento. La semana pasada trascendieron los testimonios de cuatro mujeres que acusaban al intérprete británico de haber abusado sexualmente de ellas y de haberlas sometido a un intenso «maltrato emocional». Tras la publicación de un reportaje, por parte del diario The Times, que sacó a relucir esos supuestos hechos, medios como la BBC anunciaron que iniciarían una investigación sobre los posibles comportamientos inapropiados que habría desplegado el artista durante sus años de colaboración profesional.
Esas pesquisas están dando sus frutos. Ahora, una mujer que prefiere mantenerse en el anonimato, pero a la que se ha asignado el nombre ficticio de Olivia, ha revelado que Brand le enseñó sus genitales tras arrinconarla en un cuarto ubicado en unos estudios radiofónicos de Los Ángeles, en el año 2008. En ese edificio, el cómico grababa su programa ‘The Russell Brand Show’ para la emisora BBC Radio 2, mientras que la presunta víctima trabajaba para otra compañía y, por tanto, no tenía ningún tipo de relación laboral con él. Eso no fue obstáculo, según la versión de los hechos que sostiene ella, para que el artista decidiera acosarla.
En la entrevista que ha concedido a la propia BBC, esta empleada ha recordado cómo Russell Brand y varios miembros de su entonces equipo llamaron a la puerta de los estudios donde trabajaba ella. Sin darle demasiada importancia a la visita, la mujer se dirigió a otra habitación en la que había un botiquín médico, sin percatarse de que el comediante la estaba siguiendo. En un momento dado, ella se dio la vuelta y se encontró cara a cara con el artista, quien había abierto sus pantalones para mostrarle sus partes íntimas.
«Me quedé pasmada y enseguida me di cuenta de que el hombre al que había dejado entrar era Russell. Y me dijo: ‘Oh, creo que no estás nada mal, no estás nada mal’. Me sentí totalmente atrapada», ha relatado en su conversación con la corporación pública británica. Afortunadamente para ella -y siempre de acuerdo con su testimonio-, Brand la dejó en paz cuando uno de sus propios colaboradores llamó a la puerta de ese almacén para requerirle, entre risas y a sabiendas de que el humorista estaba haciendo de las suyas.
La mencionada Olivia reconoce que, al verse en semejante situación, se quedó momentáneamente paralizada y tardó en reaccionar. Su vía de escape fue la de sumarse a las bromas y demás comentarios jocosos que había iniciado el propio Brand con ciertos miembros de su equipo. Curiosamente, en el programa de radio que se emitió poco después de lo sucedido, el que fuera marido de la cantante Katy Perry y el copresentador del espacio, Matt Morgan, no dudaron en rememorar lo sucedido como si de una hilarante anécdota se tratara. «Le ha enseñado el pito a una dama. Le riñeron por tocar una campana y, minutos después, se saca la cola», dice Morgan mientras se oye a Brand reírse a carcajadas.
