La estrella del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el Paseo de la Fama de Hollywood fue vandalizada y destruida totalmente otra vez y el presunto agresor se entregó ante las autoridades, así informó el Departamento de Policía de Beverly Hills.
Esta no es la primera vez que el sitio es vandalizado, ya que en octubre de 2016 otro hombre destruyó la estrella ubicada en el boulevard Hollywood muy cerca de la avenida Highland cuando Trump era candidato presidencial. La estrella tenía una vigilancia especial desde 2016, ya que de manera frecuente era objeto de agresiones que iban desde pintura de grafiti y otras acciones como colocar excremento encima de la misma o hasta poner un diminuto muro alrededor de ella.
La estrella le fue otorgada a Trump en enero de 2007 como presentador del programa de reality “The Apprentice” (El Aprendiz) en la pantalla chica.
Este nuevo acto de vandalismo a la estrella fue realizadO por un sujeto que llegó alrededor de las tres y media de la madrugada, llevando un pico en un porta guitarra. Destruyó totalmente la estrella, así como las letras que forman el nombre del mandatario. Una hora después, el hombre se entregó de forma voluntaria a las autoridades.
En octubre de 2016, cuando Trump era candidato, un individuo utilizó un pico para destruir la estrella, este sujeto pagó alrededor de cuatro mil 400 dólares, para que fuera restaurada y fue sancionado con 20 días de servicio comunitario y tres años de libertad condicional. El costo para reparar la estrella oscila entre cuatro mil a 10 mil dólares.
En esta ocasión, después de haber sido destruida, en las primeras horas de este día dos personas más pintarrajearon un grafiti en la estrella y hasta colocaron encima un aparato de gimnasio, mientras que personas acudieron a la estrella a tomar fotos de la acción.
La seguridad privada en el área intentó intervenir pero no pudo detener al hombre porque no tienen poderes policiales. Para cuando los policías llegaron a la escena, el hombre ya no estaba.
Sin embargo, aproximadamente una hora más tarde, los funcionarios dicen que el hombre caminó hasta la sede de la policía de Beverly Hills, se identificó y dijo que quería entregarse. Los policías de LAPD lo recogieron poco después y lo pusieron bajo custodia; se le acusará de vandalismo, entre otros cargos.
