Mucho se ha especulado sobre cómo era la casa donde vivió el famoso Gaspar Henaine, mejor conocido como Capulina, sin embargo, hasta hace muy poco su nieto Oliver reveló finalmente cómo era cada uno de los espacios en los que habitó el querido actor mexicano durante sus últimos años de vida.
Aunque no es la única propiedad con la que contaba Capulina, este inmueble era considerado como una estancia de descanso en la que frecuentemente se reunían los familiares del artista los fines de semana a convivir o que contaba con espacios bastante accesibles para que la movilidad fuera sencilla y agradable.
De acuerdo con el nieto del actor, la casa fue construida de un solo piso para evitar que tanto Gaspar como su esposa, María Frías, tuvieran dificultades cuando fueran mayores. Ya fuera al momento de querer subir por algunas escaleras o algo por el estilo.
Por fuera se puede apreciar un extenso jardín, bien podado, con una fuente en el centro y varios árboles frutales. Las paredes blancas con tejados verdes otorgan un aire pintoresco a la residencia.
“Me acuerdo de algo muy padre y es que con mi abuelita salíamos al jardín y ella tiene árboles de diferentes tipos: tiene limones, ciruelas, tenía diferentes árboles y entonces a veces me decía: “Vamos a la pizca” […] y eso nos lo llevábamos a la casa y pues nos lo comíamos”, expresó Oliver Henaine en un video compartido desde la cuenta oficial de Capulina en Facebook.
En la residencia de color blanco también puede apreciarse un pequeño pasillo al exterior que dirige a la entrada de la casa. Por ahí Capulina solía dar pequeños paseos para digerir la comida o incluso realizar alguna oración, pues siempre fue un hombre muy creyente.
Tras el fallecimiento del actor, la familia del artista remodeló la casa y también la puso en renta, sin embargo, actualmente se encuentra desocupada y no cuenta con muebles.
También en la parte externa se encuentra un portón blanco que permite la entrada al lugar en donde estaba el estudio de Gaspar Henaine. En este sentido, el histrión acudía durante las tardes a dicho espacio y tenía un teclado, el cual utilizaba con mucho gusto.
Asimismo, estaban sus trofeos y otros objetos personales que posteriormente fueron conservados por sus hijos.
Ya dentro del estudio se puede encontrar un pequeño bar de madera, el cual Capulina tenía para sus invitados o aquellos que acudieran a entrevistarlo, pues él no bebía alcohol. También dentro de este lugar estaba la oficina de la esposa de Gaspar.
Al ingresar a la estancia principal de la casa, pueden observarse amplias ventanas que cubren casi todo el espacio de la pared. Aunque a la fecha el hogar se encuentra deshabitado, el nieto de Capulina recordó que su abuelo, tras hacer un recorrido después de comer, solía sentarse en el sillón, mientras los demás familiares continuaban platicando en la sobremesa.
Otro aspecto relevante del inmueble es que había un enorme domo en el techo y era justo debajo de este sitio donde el comediante y su esposa también jugaban cartas, UNO o platicaban entre ellos.
Además, la casa cuenta con 5 baños y uno de ellos se encuentra semi escondido en el jardín, ya que era el de la oficina de Capulina y el que utilizaban los invitados, pero con el tiempo un árbol creció y sus ramas cubrieron un poco la puerta del lugar.
Los clósets del actor son otro tema, pues son tan grandes que incluso tres personas podrían entrar en ellos.
El último aspecto es la alberca, la cual cuenta con algunos adornos de delfín en las paredes que la rodean que aún permanecen intactos.
¿Quién fue Capulina?
Gaspar Henaine Pérez, mejor conocido como Capulina, fue un actor y comediante mexicano reconocido a nivel mundial por el humor blanco que manejaba. Nació el 6 de enero de 1930 en el estado de Puebla de donde se mudó con su familia hacia la capital.
Su carrera como actor comenzó cuando tenía 14 años, pero también formó parte de grupos musicales como “Los Excéntricos del Ritmo” y “Los Trincas”.
La fama llegó para el actor principalmente cuando hizo mancuerna con Marco Antonio Campos Contreras, conocido como Viruta, con quien realizó varias películas desde 1951.
Fue también actor de teatro y formó parte de un circo con el que viajó alrededor del mundo, este era llamado “El Circo de Capulina”, hasta que se retiró en 1997. En el año 2011 murió, no sin antes dejar marcados a miles de mexicanos con su comedia, quienes hasta la fecha lo recuerdan con cariño.
La fama de Capulina, no alcanza a los histriónicos de la Asamblea Legislativa, que sus horas están contadas. Bye dipuratas.