Si escuchas que Mel Gibson podría haber protagonizado Terminator, la primera película de la saga, lo más seguro es que pienses que iba a interpretar a Reese, el humano procedente del futuro y padre de John Connor, y que finalmente fue sustituido por el carismático Michael Biehn. Pero en realidad, Gibson optaba al papel del Terminator. ¿sorprendido? Espera que hay más, porque en un primer momento Arnold Schwarzenegger iba a interpretar a Reese. ¿Qué locura es esta? Pues es tan solo el principio de la loca historia del reparto de Terminator, que incluía a personajes tan variopintos como Sting, O.J. Simpson o Sylvester Stallone.
Un reparto improvable
En 1984, Mel Gibson ya era una estrella en ascenso gracias a su papel como Max Rockatansky en la franquicia de Mad Max. Sin embargo, cuando James Cameron y los productores de Terminator se acercaron a él para ofrecerle el papel del asesino cibernético, Gibson rechazó la oferta. Según cuenta la leyenda, Gibson no se veía encajando en el papel de un robot asesino, posiblemente porque venía de interpretar a personajes casi mudos en Mad Max, donde ya había tenido diálogos muy limitados.
Otro nombre que resuena como una curiosa anécdota en el casting de Terminator es el de O.J. Simpson. El exjugador de fútbol americano y actor, que en los años 80 era conocido por su carisma en pantalla, también fue considerado para el papel del implacable T-800. A pesar de su popularidad, James Cameron no le veía en el papel, ya que el director no creía que el público pudiera verlo como un villano convincente.
Arnold Schwarzenegger, de héroe a villano
Si bien hoy es imposible desvincular la imagen de Arnold Schwarzenegger del icónico papel del T-800, lo cierto es que en un principio no estaba destinado a interpretarlo. En los primeros compases del proceso de casting, Schwarzenegger era una opción para interpretar a Kyle Reese, el heroico soldado humano y padre de John Connor. De hecho, los productores de Orion Pictures, el estudio detrás de Terminator, estaban convencidos de que Arnold era la elección perfecta para ese papel. Pero James Cameron, de nuevo, no lo veía así. El director temía que la poderosa presencia física de Schwarzenegger dominara demasiado la pantalla, lo que no encajaba con la idea de Reese como un hombre normal en una situación desesperada.
Cuando Schwarzenegger y Cameron se reunieron, el actor comenzó a mostrar su fascinación por el villano de la película, el Terminator. Cameron, tras ver cómo el actor hablaba del T-800, tuvo una epifanía: La corpulenta e intimidante figura de Schwarzenegger no era adecuada para interpretar a Reese, pero era perfecta para el imparable villano. Y así, de una manera casi accidental, Arnold Schwarzenegger se convirtió en el Terminator, un papel que definiría su carrera y le catapultaría a la cima de Hollywood.
Si Arnold Schwarzenegger no hubiera aceptado el papel del Terminator, existe la posibilidad de que otro titán de los años 80 hubiera tomado su lugar: Sylvester Stallone. Conocido por su gran trabajo en Rocky Balboa y la saga Rambo, Stallone también estaba en la lista de posibles candidatos para interpretar al T-800. Sin embargo, al contrario que Schwarzenegger, Stallone ya estaba asociado a papeles heroicos. El hecho de que dos de los actores más musculosos y reconocibles de la década hubieran coincidido en pantalla en aquel momento de su carrera sin duda habría cambiado su complicada relación y el panorama profesional de Hollywood de aquella década.
Sting, Kurt Russell y otros nombres que casi protagonizan Terminator
Otro nombre que estuvo en consideración para el papel de Kyle Reese fue el del cantante y actor Sting. En los años 80, Sting comenzaba a construir una carrera en el cine además de su éxito con la banda The Police. Sin embargo, el cantante británico no pudo asumir el papel debido a conflictos de agenda, ya que estaba ocupado rodando Dune con David Lynch, en el papel de Feyd-Rautha. La idea de ver a Sting como Reese sigue siendo una curiosidad, pero no fue el único nombre llamativo que estuvo cerca de formar parte del universo de Terminator.
Otro actor que estuvo a punto de ponerse en la piel de Kyle Reese fue Kurt Russell. Ya consagrado como una estrella de acción por su trabajo en películas como 1997: Rescate en Nueva York, de John Carpenter, Russell también fue considerado seriamente para el papel. Sin embargo, por razones que no se han aclarado del todo, Russell finalmente no firmó para el proyecto, lo que permitió a Michael Biehn hacerse con el papel. Además de Sting y Russell, otros nombres como Mickey Rourke también sonaron para interpretar a Reese, pero ninguno terminó comprometiéndose con el proyecto.
Linda Hamilton: el último golpe de suerte
El proceso de casting para el papel de Sarah Connor también tuvo su parte de curiosidades. Aunque Linda Hamilton acabó interpretando a la madre de John Connor y se convirtió en una de las heroínas más icónicas del cine de ciencia ficción, el papel no fue suyo desde el principio. De hecho, actrices como Jennifer Jason Leigh y Rosanna Arquette fueron consideradas para el papel. Pero quizá la historia más interesante es la de Lisa Langlois, quien llegó a leer el guion junto a Michael Biehn. Langlois habría interpretado a Sarah Connor, de no haber sido por una inesperada lesión en el tobillo que hizo que Hamilton la sustituyera.
A día de hoy, resulta casi imposible imaginar a otro reparto para The Terminator, sin embargo, es interesante pensar en lo diferente que podría haber sido la película con O.J. Simpson, Sting o Stallone en los papeles principales. Aunque el reparto final resultó perfecto, la historia de la saga Terminator y su éxito podría haber sido muy diferente.