El podcast ‘Archetypes’, presentado por Meghan Markle, duquesa de Sussex, se convirtió en uno de los fenómenos radiofónicos del año pasado en la plataforma Spotify, sobre todo porque la antigua actriz aprovechaba su espacio para sincerarse sobre aspectos muy personales de su vida cotidiana junto al príncipe Harry y los dos hijos que se desprenden de su matrimonio: los pequeños Archie y Lilibet Diana. Su emisión coincidió, asimismo, con el turbulento período en el que salieron a la luz las incendiarias memorias de su esposo, ‘En la sombra’, y en el que se estrenó una miniserie documental en Netflix que ahondaba en el día a día de la pareja.
Sin embargo, la andadura conjunta de ‘Archewell Audio’, como se denomina la división de negocios radiofónicos de la pareja, y la compañía sueca ha llegado a su fin. Las partes han emitido una nota de prensa conjunta, publicada este viernes por el diario The New York Times, para anunciar que se disponen a seguir «caminos separados» tras la emisión de una sola temporada. Hay que recordar que Meghan y Harry firmaron un acuerdo de colaboración con la firma hace ya tres años, precisamente cuando abandonaron el Reino Unido y sus funciones en la realeza para instalarse en California. Supuestamente, en ese contrato estaban previstos unos beneficios de 20 millones de dólares para la pareja, a condición de que salieran adelante un volumen determinado de programas, un objetivo que no parece haberse cumplido.
«Meghan continuará desarrollando contenidos para la audiencia de ‘Archetypes’ en otra plataforma», reza un extracto de ese comunicado que confirma el divorcio entre los antiguos socios. Se desconocen oficialmente los motivos que habrían desembocado en esta sorprendente decisión, pero podrían estar ligados a la reciente marcha de Rebecca Sananès, productora ejecutiva del podcast, y al fichaje de la duquesa de Sussex por parte de la agencia de talentos WME, que representa a artistas de la talla de Rihanna, Dwayne Johnson, Christian Bale, Matt Damon y Ben Affleck.
En su ya difunto podcast, la que fuera protagonista de la serie ‘Suits’ entrevistó a algunas de las estrellas más rutilantes de la cultura popular, como la cantante Mariah Carey, con la que conversó sobre las dificultades de ser una persona birracial en Estados Unidos, su buena amiga Serena Williams, quien se había retirado del tenis profesional sólo unos meses antes para centrarse en la crianza de su hija Olympia, o la estrella televisiva Paris Hilton, quien se había casado poco antes con su ya marido Carter Reum y se preparaba para debutar en la maternidad. Esa ventana a su intimidad y a la de sus invitados generó una gran repercusión en las redes sociales, lo que también se tradujo en un sinfín de titulares en la prensa internacional.
El éxito cosechado con su iniciativa la hizo merecedora del premio Gracie Award, que le fue entregado el pasado mes de mayo en una ceremonia que tuvo lugar en Nueva York y que terminó en polémica. Y es que los duques denunciaron, poco después de abandonar la gala, que su vehículo había sido objeto de una temeraria persecución por parte de los paparazzi. Harry y Meghan aseguraron en un comunicado que el acoso de los reporteros gráficos podría haber tenido consecuencias «catastróficas», pero el departamento de policía de la ciudad y su propio alcalde, Eric Adams, no tardaron en cuestionar el dramatismo de ese relato.