En 2021, tras ser acusado de violencia y agresión sexual por una docena de mujeres entre las que se encontraba su antigua prometida Evan Rachel Wood, Marilyn Manson estuvo en busca y captura por un incidente que se remontaba a 2019.
La policía de New Hampshire tenía pendiente una orden de arresto en su contra por escupir supuestamente sobre una operaria de cámara y lanzarle un puñado de mocos en un incidente que tuvo lugar en el Bank of New Hampshire Pavilion.
El cantante, cuyo nombre real es Brian Warner, tuvo que comparecer en persona ante el tribunal el lunes para escuchar su condena. Finalmente cumplirá 20 horas de servicio comunitario, que podrá realizar en California, y pagará una multa de 1.400 dólares.
Inicialmente se había declarado inocente, pero más tarde cambió su estrategia para declararse ‘no culpable ‘. Esta opción significa que el acusado no impugna los cargos presentados en su contrato pero no se le exige que admita su culpabilidad.
El investigador policial que revisó las imágenes del evento confirmó en el tribunal que Manson fue visto acercando su cara a la cámara que sostenía la fotógrafa Susan Fountain y escupiéndole con fuerza. Poco después regresó para arrodillarse frente a ella y se llevó la mano a la nariz antes de lanzarle una «cantidad significativa de moco».
El informe policial añade que la cámara muestra a Manson «señalando y riéndose de Fountain mientras ella se agacha y se aleja».
