El mundo de James Bond ha dado un giro inesperado. En un movimiento que sorprendió a Hollywood y a la industria cinematográfica, los históricos productores de la franquicia, Barbara Broccoli y Michael G. Wilson, terminaron vendiendo el control de 007 a Amazon.
Como menciona The Hollywood Reporter, la noticia, anunciada días antes de la última ceremonia de los premios Oscar, marca el fin de una era y el inicio de un futuro incierto para el agente secreto más famoso del cine.
Una venta inesperada y la ruptura con el legado familiar
Este domingo, durante los premios de la Academia, la organización dedicó un homenaje musical a la saga de James Bond, con una espectacular coreografía en honor a los más de 60 años del personaje en la pantalla grande.
Sin embargo, lo que nadie esperaba era la noticia que había sacudido a la industria apenas unos días antes: Broccoli y Wilson, herederos del control de la franquicia desde 1995, habían vendido Bond a Amazon.
Para muchos, la sorpresa fue mayúscula. Durante décadas, ambos productores se habían mostrado férreos guardianes de la franquicia, protegiendo la visión cinematográfica que su padre, Albert Cubby Broccoli, había establecido desde Dr. No (1962).
Su enfoque había sido claro: mantener a James Bond como una experiencia cinematográfica exclusiva, evitando la tentación de expandir la saga en múltiples formatos o ceder el control a los estudios de Hollywood.
El renacimiento de Bond bajo los Broccoli
Cuando Barbara Broccoli y Michael G. Wilson tomaron las riendas de la franquicia en 1995, Bond estaba en crisis. Las dos películas protagonizadas por Timothy Dalton, The Living Daylights (1987) y Licence to Kill (1989), no habían logrado el impacto esperado, y la saga parecía haber perdido relevancia. Con la salud de Cubby Broccoli en declive, muchos dudaban que 007 volviera a la pantalla.
Sin embargo, los nuevos productores lograron asegurar 60 millones de dólares para financiar GoldenEye (1995), con Pierce Brosnan en el papel de Bond, lo que revitalizó la franquicia y marcó el inicio de una nueva era.
Pero el verdadero punto de inflexión llegó en 2006, cuando decidieron reiniciar la historia con Casino Royale, basada en la primera novela de Ian Fleming.
Con Daniel Craig como protagonista, las películas de Bond alcanzaron su mayor éxito comercial. Skyfall (2012) se convirtió en la primera de la saga en superar los mil millones de dólares en taquilla, consolidando la visión de los Broccoli sobre el personaje.
La compra de MGM por Amazon y los conflictos con EON Productions
En 2022, Amazon adquirió MGM, el estudio que había sido el hogar de James Bond durante décadas, en una transacción valuada en 8.500 millones de dólares.
El principal atractivo de la compra era claro: la franquicia 007 representaba una mina de oro con potencial para expandirse más allá del cine, siguiendo el modelo de Marvel o Star Wars.
Sin embargo, existía un obstáculo importante: el acuerdo de MGM con EON Productions, la compañía de los Broccoli, que les garantizaba el control creativo total sobre Bond.
Esto significaba que, aunque Amazon poseía los derechos de distribución y producción, no podía tomar decisiones sin la aprobación de los históricos productores.
La compra de MGM por Amazon y los conflictos con EON Productions
En 2022, Amazon adquirió MGM, el estudio que había sido el hogar de James Bond durante décadas, en una transacción valuada en 8.500 millones de dólares.
El principal atractivo de la compra era claro: la franquicia 007 representaba una mina de oro con potencial para expandirse más allá del cine, siguiendo el modelo de Marvel o Star Wars.
Sin embargo, existía un obstáculo importante: el acuerdo de MGM con EON Productions, la compañía de los Broccoli, que les garantizaba el control creativo total sobre Bond.
Esto significaba que, aunque Amazon poseía los derechos de distribución y producción, no podía tomar decisiones sin la aprobación de los históricos productores.
A pesar de los intentos de la empresa de Jeff Bezos por persuadir a los Broccoli de expandir el universo Bond a la televisión, estos se mostraron inflexibles.
Se rechazaron propuestas para series derivadas sobre personajes secundarios, como Moneypenny o el agente de la CIA Felix Leiter, e incluso una idea para un reality show de espionaje.
La visión de los Broccoli seguía siendo la misma: Bond debía mantenerse como una experiencia exclusiva para la pantalla grande.
El fin de una era: la salida de los Broccoli
El conflicto con Amazon se fue intensificando. La relación entre ambas partes se deterioró aún más cuando The Wall Street Journal publicó un artículo en el que Barbara Broccoli describía a los ejecutivos de Amazon como “fucking idiots”, reflejando su frustración por las presiones que recibía para transformar la franquicia.
Finalmente, en diciembre, Jeff Bezos tomó una decisión drástica: compró el control total de Bond por una cifra cercana a los 1.000 millones de dólares.
La transacción puso fin a la era Broccoli y dejó a Amazon con libertad absoluta para explotar la franquicia a su antojo.
¿Un futuro incierto para James Bond?
Con la salida de los Broccoli, Amazon enfrenta ahora el desafío de definir el futuro de James Bond sin el equipo que lo llevó a su mayor éxito.
La compañía ha demostrado tener una gestión irregular de grandes franquicias: El Señor de los Anillos: Los anillos de poder, una de sus mayores apuestas, tuvo una recepción mixta a pesar de su millonario presupuesto, mientras que Citadel, su intento de crear un universo de espionaje, no logró despegar.
Para muchos fanáticos, la adquisición de Bond por Amazon ha sido vista como una sentencia de muerte para la franquicia.
Tras el anuncio de la venta, las redes sociales se llenaron de mensajes lamentando la transformación de 007 en una marca más dentro del catálogo de streaming.
Incluso Timothy Dalton, quien interpretó a Bond en los años 80, expresó su preocupación, aunque mantuvo la esperanza de que la compañía supiera manejar la saga con respeto.
A pesar de las críticas, la compra también representa una oportunidad. Con una nueva visión y mayores recursos, Amazon podría modernizar a Bond sin los límites creativos que imponían los Broccoli.
Directores como Christopher Nolan han mostrado interés en la franquicia en el pasado, y una renovación bien planificada podría dar un nuevo aire al personaje.
El gran interrogante ahora es si Amazon será capaz de respetar la esencia de James Bond o si, en su intento por explotar la franquicia, terminará diluyendo su legado en un sinfín de productos secundarios.
Con un nuevo actor por elegir, una historia aún por definir y la sombra de los Broccoli en el horizonte, el futuro del espía británico más famoso del cine está en juego.
Lo único seguro es que, en este nuevo capítulo, James Bond tendrá que enfrentarse a su misión más difícil: sobrevivir sin los Broccoli.