El rapero estadounidense Kendrick Lamar fue el protagonista del espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LIX, en el que los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles se enfrentaron por el título de la NFL. El rapero llegó al evento tras un año de éxito y controversia, impulsado por su tema “Not Like Us”, que recientemente fue premiado en los Grammy 2025 y que ha sido el centro de su feroz enfrentamiento con el canadiense Drake, una disputa que incluso ha escalado a una demanda legal.
Cabe destacar que la tensión entre Kendrick Lamar y Drake no es nueva, pues su historia se remonta a 2011, cuando colaboraron en el álbum Take Care de Drake, un disco que marcó un punto clave en la carrera de ambos. Sin embargo, la relación entre los raperos se fracturó en 2013, cuando Lamar lanzó el tema Control junto a Big Sean, en el que desafió a varios artistas, incluido Drake. Desde entonces, los intercambios de indirectas en sus canciones fueron en aumento.
En 2024, la disputa alcanzó un nuevo nivel cuando ambos comenzaron a lanzar temas con ataques personales directos. Drake avivó la controversia con Family Matters, donde insinuó que el representante de Lamar había tenido un hijo con la pareja del rapero estadounidense y que este intentó ocultarlo con un pago.
La respuesta de Kendrick no se hizo esperar. En Meet the Grahams, él lanzó duras acusaciones contra su colega, comparándolo con Harvey Weinstein y llamándolo “hombre enfermo” que “debería morir” para no seguir dañando a las mujeres.
El conflicto alcanzó su punto más álgido con el lanzamiento de “Not Like Us”, un tema que se convirtió en un fenómeno mundial y en el mayor éxito de Kendrick Lamar en los últimos años. En la canción, Lamar lanza acusaciones veladas y directas contra del canadiense, sugiriendo en una de las líneas: “A ver, Drake, oí que te gustan jóvenes”, y luego refiriéndose a él y a su equipo como “pedófilos certificados”.
La polémica aumentó cuando se reveló la portada del sencillo, que muestra una imagen satelital de la mansión de Drake con marcas de agua que hacen referencia al registro de abusadores sexuales.
Ante el impacto de la canción, Drake respondió con una demanda contra Universal Music Group, argumentando que la publicación y promoción de Not Like Us priorizó “la codicia corporativa por encima de la seguridad y bienestar de sus artistas”.
Asimismo, la demanda, presentada ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, acusa a Universal de haber “aprobado, publicado y lanzado una campaña para crear un éxito viral a partir de una canción de rap” que “pretendía transmitir la acusación específica, inequívoca y falsa de que Drake es un pedófilo criminal y sugerir que el público debería recurrir a la justicia por la propia mano como respuesta”.
Es por ello que después de que el rapero interpretó “Not Like Us”, un tema que, en teoría no podía ser parte de su setlist en el evento deportivo, pero que finalmente llevó al escenario desafiando cualquier restricción, podría traerle un problema legal, ya que la canción fue vista por millones de personas y podría abrir la puerta a acciones legales por difamación.
Ante las versiones de esa posible denuncia, Lamar no pronunció la línea de “Certified pedophile” -pedófilo certificado.-durante la interpretación.
Por si fuera poco, en el espectáculo de Super Bowl, Kendrick no cantó “Meet the Grahams”, en la que castiga sin piedad a la familia de Drake, incluidos sus padres y su hijo de seis años, Adonis, y acusa a Drake de ser adicto al juego y emplear a personas condenadas por delitos sexuales. Pero sí que cantó, “Euphoria”, tema en el que describe al canadiense como un “maestro manipulador y mentiroso”.
