Jason Momoa no tiene ninguna prisa por comprarse una impresionante mansión en alguna de las zonas de Los Ángeles que tanto le gustan a sus compañeros de profesión, o en algún lugar más apartado, para convertirla en su nuevo hogar tras su divorcio de Lisa Bonet.
Actualmente la estrella de ‘Aquaman’ no tiene una residencia permanente porque está trabajando en varios proyectos por todo el mundo, y prefiere que sea el trabajo el que le lleve a nuevos lugares.
«Ahora mismo ni siquiera tengo casa. Vivo en la carretera. Actualmente estoy en Nueva Zelanda para empezar ‘Minecraft’. Espero que a todo el mundo le encante», ha explicado al portal ‘Entertainment Tonight’.
La pasión del actor por la vida nómada es algo que ha explotado al máximo en su última serie, ‘On the Roam’, que le ha llevado a viajar por todo Estados Unidos para visitar a artesanos tradicionales y descubrir cómo se fabrican diversos objetos, como bicicletas y motocicletas centenarias.
Más de un lugareño se quedó de piedra al verle aparecer con sus collares y sus tatuajes en un remoto pueblo para grabar.
«Siempre estoy en sitios raros. Me vas a encontrar en la carretera. Me pasa todo el tiempo. Me preguntan: ‘¿Qué demonios haces en nuestra ciudad?’. Me encanta la idea de estar con la gente corriente y hacer mi oficio, que es filmar, y luego enseñárselo. Creo que, de tanto hacerlo, me ha picado la curiosidad».
Por cierto, su intención es subastar por Instagram muchos de los objetos que descubrió gracias a la serie según se vayan emitiendo los episodios que cuentan su procedencia.