El éxito de ‘IntensaMente 2’, la secuela de Pixar que se ha convertido en la película animada más taquillera de todos los tiempos, ha sido ensombrecido por las revelaciones de ex-empleados que trabajaron en la producción. A pesar de la aclamación y las cifras récord en taquilla, estos ex-trabajadores han compartido sus experiencias de trabajo en condiciones extremas, así como preocupaciones sobre la cultura interna de Pixar y las decisiones tomadas por Disney.
¿Qué tipo de presión enfrentaron los trabajadores durante la producción de ‘IntensaMente 2’?
Según testimonios anónimos de diez ex-empleados, la presión para que ‘IntensaMente 2’ fuera un éxito fue abrumadora. Muchos de ellos relatan que se vieron obligados a trabajar horas extraordinarias, a menudo siete días a la semana, para cumplir con las exigencias del estudio. Uno de los ex-empleados comentó que “durante uno o dos meses, los animadores trabajaron sin parar, en un ambiente que resultó ser horrendo”.
La situación se agravó por los despidos que afectaron al 14% de la plantilla de Pixar, lo que dejó a muchos sin la compensación que esperaban tras el éxito de la película. Esta falta de apoyo financiero y emocional ha dejado a muchos ex-trabajadores enfrentando dificultades económicas y, en algunos casos, sintiéndose “exiliados” de la compañía.
¿Cómo afectaron las decisiones de Disney la narrativa y la representación en ‘IntensaMente 2’?
Además de las dificultades laborales, los ex-empleados también han expresado preocupaciones sobre la dirección creativa que tomó Disney durante el desarrollo de ‘IntensaMente 2’. Se menciona que hubo intentos de suavizar las temáticas LGBTQ en la película, con indicaciones para que el personaje principal, Riley, se presentara como “menos gay”.
Esto generó malestar entre los empleados, quienes sentían que se estaba perdiendo una oportunidad de abordar temas relevantes de manera auténtica. La insistencia en mantener una narrativa “universal” ha llevado a cuestionamientos sobre la verdadera diversidad de las historias que Pixar presenta, especialmente cuando muchos consideran que la compañía se ha vuelto demasiado reacia a explorar temáticas inclusivas.
¿Qué implicaciones tienen estos eventos para el futuro de Pixar y su cultura laboral?
Los ex-empleados temen que la cultura interna de Pixar, marcada por una dependencia excesiva en figuras como el director creativo Pete Docter, esté conduciendo a una repetición de los mismos problemas en futuros proyectos. Se menciona que, a pesar del éxito rotundo de ‘IntensaMente 2’, no ha habido cambios significativos en la forma en que se manejan los proyectos dentro del estudio.
Muchos creen que las lecciones no aprendidas sobre el estrés laboral y la falta de representación adecuada pueden llevar a más descontento entre los empleados. Un ex-empleado concluyó que “la moral es baja” y que la compañía se siente “rudderless”, es decir, a la deriva, al no tener una dirección clara para el futuro.
Mientras ‘IntensaMente 2’ continúa triunfando en taquilla, la sombra de las experiencias de sus creadores resalta la necesidad de un cambio estructural en Pixar y Disney para garantizar que la creatividad y el bienestar de sus empleados sean prioritarios en su búsqueda de éxito.