El testimonio ante el tribunal de un experto independiente en armas arrojó el martes nuevas dudas sobre la versión de Alec Baldwin de que su arma se disparó sin apretar el gatillo en el tiroteo mortal de una directora de fotografía durante un ensayo de 2021 en el set de la película del Oeste “Rust”.
Baldwin se ha declarado inocente de homicidio involuntario con un juicio previsto para julio por la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins durante un ensayo de la película en las afueras de Santa Fe.
La armadora de “Rust”, Hannah Gutierrez-Reed, está siendo juzgada por su posible participación en la muerte, declarándose inocente de los cargos de homicidio involuntario y manipulación de pruebas. El juicio de la armera tiene complejas implicaciones para Baldwin, que no ha comparecido ante el tribunal.
El martes, el experto en armas de fuego Lucien Haag hizo una larga demostración del funcionamiento de un revólver Colt de acción simple, como el que empuñaba Baldwin, y de los dispositivos de seguridad que impiden que un martillo totalmente amartillado golpee y dispare munición a menos que se apriete el gatillo.
Un experto del FBI declaró ante el tribunal el lunes que el revólver utilizado por Baldwin funcionaba perfectamente con los dispositivos de seguridad cuando llegó a un laboratorio del FBI. El experto declaró que tuvo que golpear el arma completamente cargada con un mazo y romperla para que disparara sin apretar el gatillo.
Haag, consultor afincado en Arizona y experto en armas de fuego del Viejo Oeste, testificó el martes que no vio ninguna prueba de que el arma fuera rota o modificada antes de ser probada por el FBI.
“¿Ha visto alguna prueba de que el martillo de cierre total o la muesca fueran limados o modificados para permitir un disparo más rápido?”, preguntó la fiscal Kari Morrissey. “No”, respondió Haag.
Haag y un colega volvieron a montar el arma con una sola pieza dañada -el martillo- para demostrar que los dispositivos de seguridad seguían funcionando de todos modos, deteniendo el martillo en diversas circunstancias cuando no se apretaba el gatillo.
Los fiscales pusieron de relieve las incoherencias de las declaraciones grabadas en vídeo de Gutiérrez-Reed, desacreditando su afirmación de que había inspeccionado todos los cartuchos de la pistola de Baldwin antes del tiroteo, sacudiéndolos para detectar un traqueteo revelador. Esa sacudida puede identificar los cartuchos de fogueo inertes en los que la pólvora ha sido sustituida por balines, pero los investigadores afirman que al menos un cartucho no contenía balines y estaba marcado como de fogueo por un agujero en el lateral.
Hancock testificó que investigó a Kenney inicialmente como posible fuente de munición real, que está expresamente prohibida en los platós de cine, pero descubrió que nunca fue al plató de “Rust” y que en un registro de su propiedad en Albuquerque se encontraron cartuchos reales que no se parecían a los cartuchos reales descubiertos posteriormente en el plató de “Rust”, incluido el cartucho que mató a Hutchins.
Mientras tanto, Gutiérrez-Reed declaró a los investigadores en noviembre de 2021 que recuperó munición suelta de una bolsa que le había sobrado del trabajo en una película anterior, comprobó que se trataba de cartuchos falsos y llevó los cartuchos en dos cajas al plató de “Rust”. Dijo que la munición estuvo primero en su coche durante dos semanas.
Preguntado sobre un posible sabotaje por parte de miembros del reparto o del equipo, Gutiérrez-Reed descartó la idea y dijo que nadie allí era “tan malintencionado”. Seis miembros del equipo de rodaje abandonaron el trabajo la noche anterior al fatal tiroteo en una disputa sobre las condiciones laborales.
Gutiérrez-Reed también dijo anteriormente a los investigadores, incluido Hancock, que Baldwin habló por teléfono durante una sesión de entrenamiento con armas de fuego para “Rust”, lo que indica que podría haber estado distraído.
Los abogados de la defensa aún no tuvieron la oportunidad de interrogar a Hancock el martes.
Los fiscales sostienen que Gutiérrez-Reed es culpable de llevar munición real al plató y que consideró opcionales los protocolos básicos de seguridad de las armas. Dicen que seis cartuchos reales encontrados en el plató de “Rust” tienen características idénticas y no coinciden con los cartuchos reales incautados al proveedor de la película en Albuquerque.