El ilusionista David Copperfield deberá responder ante una demanda millonaria por parte de la junta directiva de un condominio en Manhattan. Los demandantes alegan que el famoso descuidó tanto su lujoso penthouse —valorado en 7 millones de dólares—, que su deterioro ha comenzado a amenazar la integridad estructural del edificio.
The Independent tuvo acceso a los documentos judiciales presentados el 8 de agosto por la junta de propietarios de The Galleria, un edificio de apartamentos ubicado en East 57th Street. El mago mejor pagado del mundo es acusado de causar daños por un valor estimado de tres millones de dólares, que también han afectado las viviendas de otros inquilinos.
Las imágenes adjuntas a la demanda muestran lo que parece ser una bañera oxidada, paredes cubiertas de moho y otras señales claras del grave estado de deterioro del inmueble que Copperfield dejó de habitar en 2018.
La demanda que fue elevada por el abogado Joshua Stricoff, en representación de The Galleria, alega que Copperfield “destrozó” el lugar, dejándolo en condiciones “espantosas”.
“Su motivación para destruir su propio apartamento y permitir que se deteriore es poco clara, especialmente cuando todavía es propietario de la Unidad y la ha puesto al mercado para su venta”, indica el documento citado también por Business Insider.
El penthouse de Copperfield abarca 15,000 pies cuadrados y ocupa cuatro niveles sobre el piso 54 del edificio. Incluye una piscina interior y fue originalmente creado al combinar dos penthouses en la década de 1970. La celebridad adquirió la propiedad en 1997 por USD 7.4 millones de dólares.
La junta del condominio alega que los problemas con Copperfield comenzaron poco después de su mudanza. Según la demanda, el mago llenó el apartamento con “máquinas de la fortuna, juegos de arcade clásicos y otros artículos extraños como ‘dispositivos de novatadas’ aparentemente utilizados por varias fraternidades durante el cambio de siglo”.
En 2015, la piscina interior de Copperfield reventó debido al uso de “accesorios de plomería de plástico ilegales e ineficaces”, y el incidente provocó daños en apartamentos hasta 30 pisos más abajo, según la demanda. Un par de años después, el ilusionista supuestamente ignoró durante años las reparaciones requeridas en las ventanas.
La situación empeoró en 2018 cuando, según la demanda, “Copperfield abandonó la Unidad, despojándola de sus muebles y accesorios”. Desde entonces, se alega que ha permitido que el apartamento “caiga en un estado de completo deterioro”.
Para sustentar la demanda, la junta presentó un informe elaborado por arquitectos. La evaluación, fechada al 10 de marzo de 2024, reveló daños severos por agua y humedad que amenazan la estructura de concreto del edificio, crecimiento de moho y hongos, claraboyas con fugas, escombros que caen, tuberías a punto de reventar, trabajo eléctrico deficiente y “grandes cantidades de materiales combustibles desatendidos”.
La demanda también alega que cuando Copperfield se mudó del penthouse en 2018, despidió al administrador de la casa, ama de llaves y al personal de mantenimiento que se encargaban de los sistemas mecánicos especializados del apartamento. Esto resultó en una falla de válvula el 27 de diciembre de 2023 que causó inundaciones en los pisos vecinos. Como se mencionó anteriormente, reparar las viviendas afectadas requirió un estimado de $3 millones de dólares.
Frente a estas acusaciones, un representante de David Copperfield declaró a The Independent que solo se trataba de “una simple disputa por el seguro”. “Las fotografías incluidas en la demanda no reflejan el estado actual del apartamento. Este es un asunto judicial y se manejará en los tribunales”, añadió su vocero.
La junta del condominio está exigiendo un total de $7.5 millones en compensación, además de daños punitivos aún por determinar y honorarios legales. Afirman que “Copperfield debe ser responsabilizado por su mala conducta” y que hasta el momento “se niega a enfrentar las las consecuencias de su negligencia”.