El director Tim Miller regresó a la Comic-Con, pero esta vez no lo hizo para promocionar una película, sino para hablar de su experiencia en Hollywood. La última vez que había estado en esta convención, se encontraba promocionando Terminator: Destino Oculto en un panel que incluyó la presencia de Linda Hamilton, Arnold Schwarzenegger y varios actores más que estaban en la película. Al involucrarse en el proyecto, su intención era la de revitalizar la franquicia con la ayuda de quienes contribuyeron a que anteriores filmes se convirtieran en clásicos, pero eso no fue lo que ocurrió.
La sexta película de la franquicia Terminator llegó a cines en 2019 con la promesa de ser un relanzamiento con sus estrellas principales, y de ser un éxito le habría abierto la puerta para realizar más secuelas. Sin embargo, a la producción distribuida por Paramount Pictures (y 20th Century en ciertos territorios) no le ayudaron los comentarios de los fans, que no estuvieron del todo contentos con el filme, y la recepción de la crítica tampoco fue la gran cosa. Además, la recaudación fue pésima y prácticamente no se recuperó lo invertido.
De esto se comentó un poco en un reciente panel de la Comic-Con organizado por Collider, con el nombre “Directors on directing”. Según Deadline, allí se le preguntó al cineasta sobre la posibilidad de que hubiera más de Terminator en su carrera en el futuro, y él contestó bromeando que no le gustaba esa pregunta y mencionó que lo mejor sería dejar tranquila a la franquicia luego de que su esfuerzo sirvió de poco.
«Terminator es una película interesante para explorar, pero tal vez la hemos explorado lo suficiente. Entré con la creencia de que si hacía una buena película que quería ver, me iría bien. Y estaba equivocado. Fue uno de esos malditos momentos Eureka en el mal sentido porque la película fracasó. [Si no funcionó], ¿por qué la gente no me devuelve las llamadas? Creo que si haces una película de Terminator de menor costo, un buen director y una estrella de cine podrían hacerla genial. Se podría hacer con títeres de calcetines y sería genial. Me gustaría hacer un Terminator CG.»
De cualquier manera, la franquicia continuará de otras formas, como en el videojuego que aún no tiene nombre pero se ha confirmado que será el primero de mundo abierto, donde el jugador tendrá que sobrevivir luego de los eventos del Día del juicio final, el holocausto nuclear creado por Skynet que destruyó gran parte de de la humanidad. Es prometedor, a pesar de que por ahora solo sabemos que será lanzado para PC y que llegaría a consolas por confirmarse en un futuro distante.
El futuro cinematográfico es incierto, así que podría considerarse a Terminator: Destino Oculto como su película final. El desempeño que tuvo en la taquilla no sirvió de mucho para que el proyecto pueda destacar lo suficiente como para hacer que sus productores se interesen en continuar con la historia. La película recaudó alrededor de US$261 millones en ventas de boletos en todo el mundo, y para un lanzamiento previo a la pandemia de una nueva entrega de una importante franquicia cinematográfica, esos números estaban muy por debajo de las expectativas.
Debido a que la película tenía un presupuesto tan alto (US$185 millones según Box Office Mojo), terminó perdiendo más de US$122 millones, lo que convirtió a Dark Fate en uno de los fracasos de taquilla más grandes que se han visto en los últimos años. Cualquier plan para desarrollar entregas adicionales se canceló en base a este bajo rendimiento y no hay planes activos en este momento para que Terminator vuelva a la pantalla grande con un nuevo proyecto.