El protagonista de la saga ‘Harry Potter’, Daniel Radcliffe, está a punto de cerrar un año inmejorable en todos los sentidos. En abril, el actor de 34 años dio la bienvenida a su primer retoño junto a su pareja, Erin Darke, a la que le une una década de sólida relación. Y por si eso no fuera suficiente, ahora ha salido a la luz que el intérprete se ha preparado a conciencia para afrontar tamaña responsabilidad también en el plano económico, como se desprende de un patrimonio personal que, según el diario Daily Mail, se habría duplicado en los últimos doce meses.
De acuerdo con la información contable que arroja la compañía Gilmore Jacobs, la cual gestionan tanto el artista como sus padres, el valor de las propiedades inmobiliarias de las que dispone Radcliffe asciende a 3,3 millones de libras esterlinas, que se unen a los más de 16 millones que habría generado el actor entre diciembre de 2022 y el último mes del presente año.
La cantidad exacta que publica el periódico, 16.085.209 libras, supone un notable incremento respecto del anterior ejercicio financiero, durante el cual Radcliffe amasó ganancias que superan los 8 millones de libras. Combinando sus rendimientos inmobiliarios, sus reservas de liquidez y otros activos, se estima que la fortuna personal del intérprete británico es de 89,7 millones de libras.
La seguridad financiera derivada de esas llamativas cifras, así como su deseo de sacar el máximo partido a su primera experiencia en la paternidad, han llevado al astro de Hollywood a tomarse un merecido descanso profesional. Y cuando vuelva al trabajo, Daniel Radcliffe ya ha avisado de que no se prodigará demasiado en la pequeña y en la gran pantalla, llevando al extremo su filosofía de ser muy «selectivo» con sus proyectos.
«Siempre supe que me tomaría algo de tiempo libre, que es algo que no todo el mundo puede hacer. Es todo un privilegio», reconocía en una entrevista reciente. «Creo que le voy a echar mucho de menos cuando vuelva al trabajo a finales de año», añadía sobre su hijo, del que no ha revelado su nombre. «Siempre he sido muy selectivo, pero creo que trabajaré menos en los próximos años. Tampoco quiero parar, no creo que eso vaya a ser bueno para mí», explicaba sobre su «maravillosa» pero, en ocasiones, «aterradora» etapa como padre.