A paso de hormiga avanza la administración de Xiomara Castro. La primera mujer presidenta de Honduras recibió un “narco-Estado”, a decir de una corte estadounidense, pobre y corrupto que se presenta con estos estigmas ante la comunidad internacional.
Sobre esta base “podrida”, a decir del directivo del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Ismael Zepeda, Xiomara Castro debe cumplir las promesas hechas en su discurso de asunción. Una tarea que no le ha sido nada fácil.
Según Zepeda, “hubo una esperanza exacerbada (en la población) debido a que las promesas de campaña fueron muy altas. Sin embargo, Pablo Carías, sociólogo hondureño, asegura que “Xiomara llega con oxígeno para la continuidad de su propuesta original”.
En este sentido, la mandataria ha sabido lidiar con varios problemas locales derivados de temas internacionales, como el alza de los precios del petróleo causada por la invasión rusa a Ucrania. Eso no evitó la protesta de varios gremios del transporte y de otros sectores reclamando soluciones diferentes, pero esto no quiere decir que su popularidad haya bajado.
Para otro sociólogo, Allan Fajardo, de la Universidad Nacional de Honduras, apenas “se están dando las bases para el cumplimiento” de mejores condiciones de vida.
Algunas promesas cumplidas a pesar del contexto
Al cumplir esta fecha simbólica, varios medios hondureños examinan el cumplimiento de su palabra.
Aunque no la tenga fácil, sus nacionales siempre van a exigir más. Tal es el caso de José Salvador Matute, un joven guardia de seguridad de 25 años. “En estos cien días no se ha visto nada, como que está peor (la situación)”, subrayó Matute. “De todo lo que ella prometió no ha cumplido nada, todo está más caro”, concluyó.
Lo cierto es que a pesar del complejo contexto que enfrenta Xiomara Castro, ha logrado concretar algunos logros. El 27 de enero, en su discurso inaugural, Castro enumeró 21 propuestas, de las que ha cumplido ocho, según la prensa local.
Entre algunas de las consumadas se encuentran la energía gratis para los pobres. Honduras cuenta con un millón de familias en esa condición que consumen menos de 150 kw por mes. Esta medida fue aprobada el dos de febrero.
El mismo día fue aprobado el subsidio de combustibles, otra de las cuestiones abordadas. La presidenta envió un proyecto de ley al Congreso Nacional que fue aprobado, rebajando 10 lempiras (moneda de curso legal en el país) a las gasolinas. Todavía no había estallado el conflicto en Ucrania, lo que hizo aumentar el precio a nivel mundial de los carburantes.
La reforma de Presupuesto de la República es otro de sus logros, así como la declaración de Honduras como “libre de minería a cielo abierto”.
Promesas incumplidas, ambiguas o en desarrollo
Pero no todas han sido cumplidas o simplemente no han avanzado.
La reducción de los intereses bancarios, el desarrollo agroforestal, del turismo y la definición de su política exterior aún no han aclarado en el panorama.
Otro de las dos promesas que se encuentran en desarrollo es el logro de la soberanía alimentaria, apostando a un proyecto con el Banco Mundial, así como la protección del medio ambiente en colaboración con las Fuerzas Armadas.
La consulta popular a las reformas constitucionales no se ven por el momento en el horizonte, que dependía de la ampliación del presupuesto del Consejo Nacional Electoral, aspecto ya consumado.
El “Gobierno digital”, el estancamiento del caso de la líder ambientalista Berta Cáceres, el retorno a las clases presenciales en su totalidad y la atención para adultos mayores, niñez y juventud, pueblos originarios y LGTBI también son temas que se espera que tomen curso con el paso del tiempo.
La mujer y sus derechos como tarea pendiente
Organizaciones de la sociedad civil, especialmente feministas, piden a la jefa de Estado una «Ley Integral», para combatir los feminicidios.
Según el Observatorio de Igualdad de Género de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal), durante el año 2020, el país centroamericano presentó la tasa más elevada de estos hechos en el continente, con 4,7 por cada 100.000 mujeres.
En cuanto al aborto, en Honduras está prohibido en todos sus extremos. La reforma realizada a la Constitución, aprobada en el año 2021 por un Congreso de mayoría conservadora, declaró su impedimento y resolvió nula cualquier reforma legal sobre el tema. Para cambiar esa norma se requiere el voto favorable de 96 de los 128 legisladores.
En cuanto los miembros de la comunicad LGBTI, el expresidente Juan Orlando Hernández, se refirió a las personas LGBTI de su país como «enemigos de la independencia» que atacaban los «principios cristianos». Según el Comisionado Nacional de Derechos Humanos de Honduras, entre 2009 y 2020 se produjeron 373 muertes violentas de la población LGBTI en el país.
Lucha contra la corrupción y el narcotráfico
Expertos consideran que durante la gestión de Castro continuarán las extradiciones. Y que el actual Gobierno da señales de lucha contra la corrupción.
La primera de ellas fue derogar la ley de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), aprobadas en el año 2013, que recibieron un fuerte rechazo al permitir territorios autónomos dentro de Honduras, violando artículos pétreos de la Constitución.
La sociedad civil consideró que estos territorios pudieron ser utilizados por narcotraficantes para evadir a la justicia.
«Honduras ha sido dañada en su reputación institucional, internacional e internamente, por un expresidente, al haberse involucrado en narcotráfico”. “Creemos que el Gobierno debe generar una política pública (contra el narcotráfico), que no la hemos visto en estos cien días», puntualizó el directivo de la ONG Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), Kenneth Madrid.
El ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, afirmó a medios de prensa internacionales que existe una «propuesta integral» para combatir los carteles.
Otra luz en el fondo del túnel es la promesa hecha por Xiomara Castro de la creación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad (CICIH), auspiciada por la ONU y que en este mes de mayo una misión de Naciones Unidas debe llegar al país para impulsar su puesta en marcha. Su objetivo fundamental sería la investigación de los casos de corrupción en la pasada y presente administración
Xiomara Castro milita en el Partido ‘Libre’ (Partido Libertad y Refundación) y es la esposa del jefe de esta tolda política, el expresidente Manuel Zelaya, derrocado por un golpe de Estado en 2009 que puso en el poder a Porfirio Lobo y luego resultando en la elección de Juan Orlando Hernández, en medio de denuncias de fraude y fuertes escándalos de corrupción.
Hernández fue extraditado recientemente a los Estados Unidos. El exmandatario es presuntamente acusado de narcotráfico. Junto a él, su hermano, ‘Tony’ Hernández, cumple cadena perpetua en suelo estadounidense por el mismo delito.