Un joven de 18 años de Bielorrusia acudió a la Policía para denunciar el robo de dinero de una mochila que había dejado sobre una banca mientras entraba a una tienda cercana. Según su testimonio, cuando regresó del negocio notó el morral abierto y que le faltaba la funda protectora de su pasaporte, donde guardaba 150 rublos bielorrusos (unos 61 dólares), informaron medios locales.
Los uniformados revisaron las cámaras de seguridad aledañas al lugar de los hechos en un intento por identificar al ladrón. Para su sorpresa, descubrieron que el responsable había sido un enorme cuervo que aprovechó para acercarse a la bolsa en ausencia de su dueño, husmeó en su interior y se llevó volando el botín.
Las autoridades decidieron no ir en busca del plumífero, pero no solo porque sería una tarea engorrosa, sino porque descubrieron que la supuesta víctima había robado poco antes ese dinero a una mujer de 52 años. En realidad, le había quitado unos 122 dólares, y la cantidad que perdió en manos del hábil animal era lo que le quedada del delito. Contra el ladrón se ha abierto una causa penal.
