En un hotel de Livonia, Michigan, en Estados Unidos, un bebé de 2 años estuvo a muy poco de morir ahogado en una alberca, de no ser por una niña de 9 años y su madrina, quienes actuaron rápido para rescatar al infante.
Una cámara de seguridad logró captar el momento, el menor entró al agua sin que sus padres se percataran, el pasado 24 de enero, él no pudo mantenerse a flote y el resto de los presentes ignoraron que estaba en peligro.
El pequeño llegó a estar durante más de 3 minutos en el fondo de la piscina, hasta que una niña se dio cuenta y le informó a su madrina para que hiciera algo, ella actuó de inmediato, consiguiendo sacar al bebé a la superficie.
La mamá de menor se encontraba también en el lugar, pero no se percató de su ausencia, por fortuna dos enfermeras del recinto lograron reanimar al niño, quien más tarde fue llevado al hospital para recibir las atenciones necesarias.