El caso de Salvatore “Sam” Anello y la muerte de su nieta Chloe en julio del 2019 ha dado un giro. Según la información que se tenía, el hombre, que estaba de vacaciones con su familia en un crucero, cargó a la niña y la asomó por una ventana que él creyó que estaba cerrada. La menor se inclinó y cayó de una altura de 45 metros y murió al chocar con el concreto.
Pero un video publicado por un medio local de Puerto Rico, muestra que el abuelo, antes de sostener a su nieta en brazos para enseñarle el exterior del barco, se asomó por la ventana. Lo que indicaría que él sí sabía que el cristal del bote estaba abierto.
Esta información es importante para el caso, ya que la familia Wiegand decidió culpar al barco por el accidente y demandarlos por negligencia. El proceso jurídico los ha tenido en medio de una disputa en la que se discute la responsabilidad que tuvo la empresa y el abuelo.
En la cinta, que era parte de la investigación, se puede ver cómo la pequeña de dos años y medio camina en una sala del crucero, en donde hay decenas de personas, y llega a las ventanas. El abuelo fue tras de ella y, después de asomarse por la ventana, la levantó para que ella también pudiera ver.
Lo siguiente que pasó fue que la paró sobre la baranda de madera. La niña, acostumbrada a golpear los cristales de las pistas de hielo en donde sus hermanos jugaban hockey, intentó hacer lo mismo. Pero en esta ocasión no había vidrio que la contuviera, por lo que cayó.
Después de que las nuevas imágenes fueron transmitidas, el abogado de la familia, Michael Winkleman, emitió un comunicado, en el que dijo: “La familia está estremecida por esta conducta deplorable y desafortunada de revelar este video. ¿No creen que no hemos sido suficientemente castigados por la pérdida de Chloe?”. La Fiscalía de Puerto Rico declaró que no supo cómo se filtró el clip.
El delito que enfrenta Anello, el abuelo de la menor, es homicidio negligente, por lo que podría pasar tres años en prisión. Sin embargo, el sostiene su inocencia y culpa al crucero por las pocas medidas de seguridad.
El caso de Chloe
La familia originaria de Indiana, decidió tomar unas vacaciones abordo de un crucero el verano pasado. Disfrutaban del sol y del mar, hasta que el 7 de julio, a las 16:27 horas, la niña de 18 meses cayó por una de las ventanas del barco Freedom of The Seas de Royal Caribbean que se encontraba en Puerto Rico.
“Cuando me dijeron que Chloe había muerto, no sabía que había caído por la ventana. Sólo vi a Sam (el abuelo) de pie frente al ventanal, gritando y dando golpes, y entonces, había alguien intentando detenerme” dijo Kimberly Wiegand, madre de la niña.
“Solamente dije ‘Llévenme con mi bebé. ¿Dónde está mi bebé?’. No sabía que había caído por la ventana. Entonces miré y no había agua ahí abajo. Era cemento. Perder a nuestra bebé así es inexplicable” dijo al programa Today Show, y agregó “No quiero que ninguna madre viva jamás la experiencia que yo viví, o ver lo que tuve que ver o gritar como yo grité”.
Después del accidente, la familia culpó al crucero. Les pareció irresponsable que en el piso 11 no hubiera ningún mecanismo de seguridad en las ventanas y que éstas se pudieran abrir. La empresa del barco dijo que la estructura era así porque necesitaban ventilación.
Hay varios vídeos y si bien uno muestra como que el abuelo se inclinó por la ventana, en realidad otro vídeo muestra que se inclinó sobre una baranda a medio medro de la ventana que no debió haber estado abierta en una zina de niños.fue un accidente