El presidente de Haití, Jovenel Moïse, ha sido asesinado anoche en un ataque armado, ha confirmado en un comunicado el primer ministro interino del país, Claude Joseph.
Alrededor de la una de la madrugada, un grupo de individuos aún desconocidos, «algunos de los cuales hablaban español», atacaron la residencia privada del mandatario y lo hirieron de muerte, indica el documento.
La primera dama, Martine Moïse, ha resultado herida de bala durante el ataque y está siendo tratada en un hospital.
Mientras tanto, el primer ministro interino y la Policía Nacional han condenado «este acto odioso, inhumano y bárbaro», al tiempo que han llamado a la población a la calma, afirmando que la situación de seguridad en el país «está bajo el control» de la Policía y de las Fuerzas Armadas.
«Se toman todas las medidas para garantizar la continuidad del Estado y para proteger a la Nación», asegura el comunicado, para concluir que «la democracia y la República ganarán».
El magnicidio se produce a menos de tres meses de las elecciones presidenciales y legislativas, convocadas para el próximo 26 de septiembre, a los que Moïse no podía presentarse. Para esa misma fecha, el mandatario había convocado un referéndum para una nueva Constitución, que contaba con las críticas de sus opositores y la comunidad internacional.
Crisis política
Moïse asumió la Presidencia del país más pobre de América el 7 de febrero de 2017 y sus últimos meses de mandato han estado rodeados por la polémica, ya que sus detractores no reconocían su legitimidad como presidente.
El mandatario fue juramentado tras la repetición de comicios electorales en noviembre de 2016, luego que las elecciones celebradas un año antes, en octubre de 2015, fueran anuladas por denuncias de fraude.
Así, la oposición consideraba que el pasado 7 de febrero vencía su mandato, ya que, según la Constitución, debido a esa repetición de los comicios, los cinco años de gobierno de Moïse comenzaron a contar en febrero 2016, una vez vencido el período del expresidente Michel Martelly, y no en 2017, cuando asumió formalmente.
A esta crisis política, además, se unía que Moïse llevaba más de un año gobernando por decreto, desde que en enero de 2020 declarara la caducidad del período legislativo, debido a que no se pudieron celebrar los comicios parlamentarios en otoño 2019, aplazados por las constantes protestas antigubernamentales que paralizaron el país en esa época.
Violencia y crisis de seguridad
Por otro lado, Haití sufre una profunda crisis de violencia agravada en las últimas semanas por las luchas territoriales entre pandillas y bandas armadas que se disputan el control de los barrios más pobres de de Puerto Príncipe. De hecho, en días recientes, el mandatario había pedido ayuda internacional para combatir a estos grupos.
El pasado 10 de junio, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) estimaba que casi 6.000 personas se habían visto obligadas a abandonar sus hogares en la capital haitiana por los constantes enfrentamientos entre grupos criminales. La organización, además, alertaba del recrudecimiento de la violencia.
Por su parte, el presidente de la Comunidad del Caribe (Caricom) y primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, calificó este lunes la situación en Haití de «insostenible» y pidió a los líderes regionales «redoblar esfuerzos para traer una resolución» que permita que «algún nivel de normalidad regrese a Haití».
Ojala y a nuestro presidente lo proteja nuestro Dios para que no vaya a sufrir algun atentado de parte de la oposicion pues sin ser un mago o alguien que prediga el futuro es algo que los de la oposicion ya pueden haber considerado.
El Primer Ministro interino, responsable por la seguridad y del presidente esta diciendo que tengan calma que el pais esta seguro y que todo esta bien. IDIOTA este individuo que no esta viendo por la total inseguridad del pais su presidente ASESINADO