Mientras diversos sectores médicos, políticos, empresariales e incluso países vecinos, piden al gobierno de Daniel Ortega que asuma medidas para evitar que la pandemia del coronavirus COVID-19 se descontrole en Nicaragua, Rosario Murillo, vicepresidente de la República y esposa de Ortega, anunció para este sábado que unos 250 mil brigadistas iniciarán visitas casa por casa “compartiendo y explicando las medidas de prevención, higiene y seguridad”. La meta es visitar un millón de hogares en una semana.
Para el doctor Álvaro Ramírez, epidemiólogo nicaragüense radicado en Irlanda, la acción anunciada por el gobierno es precisamente “lo que no se debe hacer”. “Todas esas medidas de movilización social, contacto uno al otro, es exposición de personas y aumentan la transmisión”, dijo
“Este sábado vamos a desplegarnos en fuerza de espíritu, en gracia de Dios y con la fortaleza de la fe y la esperanza; en estos tiempos de COVID-19 donde el amor debe prevalecer”, dijo Murillo al anunciar la masiva visita casa a casa.
Desde finales de febrero pasado, el gobierno de Daniel Ortega anunció su decisión de ir en dirección contraria a las disposiciones que otros países del mundo están tomando para frenar el avance del coronavirus. La asesora presidencial, doctora Sonia Castro, aseguró que el Ministerio de Salud (MINSA) “no ha establecido ni establecerá ningún tipo de cuarentena en el país” y Rosario Murillo dijo que Nicaragua no dispondría restricciones migratorias, tal como han hecho los países vecinos.
Desoyendo las recomendaciones del distanciamiento social en que insisten los expertos, el gobierno de Ortega organizó el sábado pasado una marcha con sus simpatizantes y funcionarios denominada “Amor en tiempos del COVID-19”.
Esta semana Nicaragua registró oficialmente sus primeros dos casos confirmados. El primero se conoció el miércoles y se trata de un militar activo del Ejército, de 40 años, que viajó recientemente a Panamá, y este viernes Rosario Murillo anuncio el segundo caso, un paciente con VIH, hipertenso y diabético, que viajó a Colombia
En toda su comunicación, el Gobierno insiste en que los casos de coronavirus registrados “son importados” para trasmitir una sensación de seguridad y control en Nicaragua, a pesar que el primer caso, se sabe, viajó tres días a Panamá y fue internado al segundo día de su regreso a Nicaragua.
La opositora Coalición Nacional acusó al gobierno de Daniel Ortega de “querer imponer a la ciudadanía nicaragüense un ambiente de seguridad y normalidad” que “contradice cualquier lógica o protocolo de atención en la materia”.
Que tonto estos señores, y el pueblo también que le sigue sus ESTUPIDECES!!! que Dios los socorra.
No han puesto a pensar que el hombre está haciendo lo correcto. No se han puesto a pensar que estar en cuarentena no es bueno para la salud y causa depresión y baja las defensas inmunológicas. Además no se puede estar en cuarentena por mucho tiempo.
Por qué lo hacen? Porque saben que una cadena oficial de radio y televisión, nadue la escucharía por estar hartos del gobierno.
Estos idiotas no solo ponen en peligro al pueblo nica sino que a todos los centroamericanos.