Este martes se llevará a cabo en Estados Unidos el llamado “Supermartes”, el día más importante de la campaña de primarias presidenciales porque es la jornada en la que votan más estados y se eligen más delegados para las convenciones partidarias. Pero esta vez, la expectativa es menor. Ocurre que como nunca en décadas, tanto republicanos como demócratas llegan al supermartes con candidaturas que ya parecen definidas. De no mediar ningún imprevisto, Joe Biden y Donald Trump volverán a medirse en las elecciones generales del 5 de noviembre. Pero a pesar de ser los claros favoritos, todavía deben cumplir con el cronograma electoral y completar el ciclo de las internas.
El número de estados que votan en el “Supermartes” varía según el año. Pero comúnmente en esta jornada se termina asignando un tercio de todos los delegados a las convenciones republicanas y demócratas. Esto significa que, si un candidato se impone en más de la mitad de las contiendas del martes, prácticamente tendría asegurada la victoria en las primarias.
Este año serán 15 los estados que votarán el martes: Alabama, Alaska, Arkansas, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah, Vermont y Virginia. También lo hará el territorio de Samoa Americana.
Asimismo, durante esa jornada también se conocerán los resultados de la contienda demócrata en Iowa, que se realizó por correo durante varias semanas. El Partido Republicano, en tanto, llevó a cabo su caucus en ese estado a mediados de enero.
¿Cuántos delegados elige cada partido?
El actual sistema fomenta una competición que se desarrolla en la primera mitad del año electoral, a partir de un calendario que se divide por estados. En función de cada territorio, se utiliza un sistema de primarias, equiparable a una votación al uso con urnas, o de caucus, en el que los ciudadanos vinculados a un determinado partido debaten y eligen a sus favoritos, en algunos casos a mano alzada y sin necesidad de papeletas.
En cualquier caso, la elección no es directa, ya que sea mediante primarias o mediante caucus, los ciudadanos lo que están decidiendo es la composición de la delegación de dicho estado en las convenciones nacionales, donde se realizará formalmente la proclamación de la persona que representará a la formación en los comicios generales.
El Partido Republicano celebrará su convención entre el 15 y el 18 de julio en Milwaukee (Wisconsin), mientras que el Demócrata se reunirá del 19 al 22 de agosto en Chicago (Illinois).
Durante el “Supermartes” de este año, los republicanos elegirán 874 de los 2.429 delegados de su convención: Alabama (50), Alaska (29), Samoa Americana (9) Arkansas (40), California (169), Colorado (37), Maine (20), Massachusetts (40), Minnesota (39), Carolina del Norte (74), Oklahoma (43), Tennessee (58), Texas (161), Utah (40), Vermont (17) y Virginia (48).
Los demócratas, en tanto, elegirán 1.383 delegados de los 3.900 de su convención: Alabama (59), Samoa Americana (11), Arkansas (36), California (495), Colorado (87), Iowa (46), Maine (32), Massachusetts (116), Minnesota (93), Carolina del Norte (133), Oklahoma (41), Tennessee (70), Texas (274), Utah (34), Vermont (24), Virginia (119).
En las primarias sólo pueden votar los afiliados a cada partido, pero seis estados tienen primarias abiertas: Alabama, Arkansas, Minnesota, Texas, Vermont y Virginia.
Biden y Trump buscan sellar sus candidaturas
Biden y Trump se vienen imponiendo con holgura en los estados donde ya disputaron las primarias. En la interna demócrata el presidente consiguió los 206 delegados disputados hasta el momento, mientras que el magnate lidera con 122 frente a los 24 que alcanzó la única rival que aún sigue en carrera, Nikki Haley, ya que otra decena abandonó la contienda por sus magros resultados. Este martes es la última oportunidad de la ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU para, al menos, frenar el avance arrollador de Trump hacia la nominación.
Las encuestas de opinión muestran al ex presidente como claro favorito en California y Texas, así como en estados como Alabama, Maine y Minnesota. Su equipo de campaña prevé que conseguirá, al menos, 773 delegados durante el Supermartes. Con este panorama, podría hacerse con la nominación una o dos semanas después.
A pesar de sus numerosos problemas judiciales, por los que incluso se expone a ir a la cárcel, el magnate republicano arrasó en las primarias de Iowa, New Hampshire, las Islas Vírgenes, Nevada, Carolina del Sur y Michigan. Tras sus contundentes victorias, ha instado repetidamente a Haley a que abandone la carrera. Sin embargo, la ex gobernadora de Carolina del Sur prometió seguir adelante.
En su intento por mantenerse competitiva, viene recorriendo el país con un potente programa de viajes, y su comando de campaña ha desplegado un equipo de liderazgo en Georgia, donde los votantes acudirán a las urnas el 12 de marzo.
Biden, por su parte, como suele ocurrir con los mandatarios en ejercicio que van en busca de su reelección, viene superando con holgura las contiendas internas en la que sólo le queda un rival en carrera, el diputado Dean Phillips (Minnesota), que aún no obtuvo ningún delegado. El único foco de preocupación se dio la semana pasada en Michigan, donde un intento organizado de votar “no comprometido” en las primarias de allí para protestar por el apoyo del Gobierno a Israel durante la guerra en Gaza obtuvo el 13% de los votos, un porcentaje ligeramente superior al que obtuvo esa opción en las últimas primarias con un presidente demócrata.
Estados clave y otras elecciones
La campaña de reelección de Biden, por su parte, tiene como uno de los grandes objetivos hacerse con Carolina del Norte porque cree que esos votantes pueden ayudarle a vencer a Trump en ese estado en las elecciones generales. En los comicios de 2020, el ex mandatario republicano ganó en ese estado por poco más de un punto porcentual.
Carolina del Norte permite a los votantes que no están afiliados a ningún partido participar en cualquier primaria que elijan, lo que podría impulsar el rendimiento de Haley dada su relativa fortaleza con los votantes independientes en comparación con Trump.
El próximo martes, además, no sólo se disputará la primaria presidencial. También habrá contiendas para el Senado, la Cámara de Representantes y algunas gobernaciones.
Una de las más importantes son las primarias de California para el escaño del Senado que quedó vacante tras la muerte de la senadora demócrata Dianne Feinstein. Su ocupante temporal, Laphonza Butler, no se presenta a un mandato completo. En lugar de que los ganadores de las primarias de los partidos se enfrenten en noviembre, California convoca a todos los candidatos a una sola primaria y los dos más votados pasan a las elecciones generales.
En Carolina del Norte el gobernador demócrata Roy Cooper dejará vacante el puesto. El fiscal general Josh Stein cuenta con el respaldo de Cooper, y tendrá como principal competidor al ex juez asociado del Tribunal Supremo del estado, Mike Morgan.
El favorito republicano es el vicegobernador Mark Robinson, quien recibió el apoyo de Trump el año pasado. Sin embargo, su figura divisiva ha generado controversia en algunos, luego de haber criticado la enseñanza de temas LGBTQ+ durante la educación sexual y por comentarios en una iglesia de que los cristianos están “llamados a ser dirigidos por hombres”. Sus oponentes, el tesorero estatal Dale Folwell y el abogado litigante Bill Graham, sostienen que es demasiado polarizador para ganar en noviembre.
En San Francisco, la alcaldesa London Breed está impulsando una medida electoral para ampliar los poderes de la policía y utilizar tácticas como drones y cámaras de vigilancia, y otra para someter a los adultos solteros que reciben asistencia social a pruebas de detección de drogas. Las dos iniciativas se presentan en un momento en que la ciudad está asolada por la falta de vivienda y el consumo de drogas, y Breed se enfrenta a un electorado irritado por su propia reelección en noviembre.
Historia del Supermartes
El término “Supermartes” existe desde la década de 1970. Pero en sus comienzos esta jornada estaba ubicada sobre el final de la carrera primaria. Una década después, en 1980, fue adelantada en el calendario para tratar de aumentar su influencia.
Ese cambio fue impulsado por estados del sur, que quisieron tener mayor influencia en la contienda. En ese entonces plantearon que tener el “Supermartes” más cerca del inicio de la carrera, le daría mayor preponderancia a esa jornada.
Desde entonces, el “Supermartes” ha dejado en ambos partidos a un claro favorito que, en la mayoría de los casos, terminó logrando la nominación.