El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha decretado este viernes el estado de alarma en el conjunto del país por la crisis derivada de la pandemia de coronavirus, después de que el número de casos se haya disparado hasta los 4.209 y se hayan producido 120 fallecimientos.
Es la segunda vez en democracia que se declara este estado, después de que en diciembre de 2010 lo hiciera José Luis Rodríguez Zapatero para hacer frente a la huelga encubierta de los controladores aéreos.
Sánchez ha destacado que la medida faculta al Ejecutivo para utilizar tanto medios públicos como privados, civiles como militares, para frenar la pandemia y proteger a los colectivos más vulnerables, como las personas mayores o aquellas con patologías previas.
«Nos esperan semanas duras», ha dicho el presidente, que ha reiterado: «haremos desde el Gobierno de España lo que haga falta, cuando haga falta y donde haga falta». «La victoria depende de cada uno de nosotros, el heroísmo consiste también en lavarse las manos», ha recalcado. Además, ha mostrado su confianza en la superación de esta crisis: «Va a ser muy duro y difícil pero vamos a parar el virus. Lo conseguiremos antes si lo hacemos unidos y cumpliendo cada cual con nuestro deber. Este virus lo pararemos unidos».
¿Qué es el estado de alarma?
El estado de alarma está recogido en el artículo 116.2 de la Constitución y contempla «crisis sanitarias, tales como epidemias» como uno de los escenarios que permite al Gobierno decretar esta situación durante 15 días. Para extenderlo más allá de ese periodo, el Ejecutivo necesita la autorización expresa del Congreso de los Diputados.
Cierre de bares y restaurantes en Madrid
Este viernes el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, anunció que se suspenden las licencias de terrazas y veladores de la capital. Solo unas horas después se ha decretado también el cierre de bares y restaurantes para evitar la propagación de la enfermedad.
La Comunidad de Madrid continúa siendo la región más afectada, con más de 60 muertos y cerca de 2.000 positivos. El Consistorio de la capital ya decretó a principios de semana el cierre de todos los centros educativos, de museos, centro culturales y deportivos, así como la clausura de las zonas infantiles de los parques de la ciudad.
El País Vasco declara la emergencia sanitaria
El presidente del País Vasco, Iñigo Urkullu, ha anunciado este viernes la declaración de la emergencia sanitaria en el territorio, después de que se hayan confirmado 417 casos positivos y se hayan producido 14 muertes en esta región.
Esta nueva situación faculta al Gobierno vasco a implementar medidas extraordinarias, como el confinamiento de poblaciones, prohibir actividades concretas y la limitación del uso de servicios públicos y privados o el consumo de bienes.
Urkullo ha considerado las medidas como «imprescindibles ante la situación del coronavirus» y ha anunciado que se destinará un primer fondo institucional de urgencia dotado con 300 millones de euros para apoyar al sistema sanitario y educativo.
La primera ciudad en aislamiento
Por su parte, el Gobierno catalán decidió el jueves confinar la ciudad de Igualada y otros tres municipios colindantes, Vilanova del Camí, Santa Margarida de Montbui y Òdena. Así, casi 70.000 habitantes han quedado confinados y las vías de entrada a estas poblaciones están cerradas.
Esta drástica medida se tomó un día después de que se conociera que había un brote de coronavirus descontrolado en el Hospital de Igualada, que se había saldado en ese momento con tres fallecidos y casi cincuenta contagios.
Murcia se une al confinamiento
El presidente del Gobierno de la Región de Murcia, Fernando López Miras, también ha decretado este viernes el confinamiento de las «zonas turísticas de la Región». La orden limita la libertad de movimientos en siete municipios: San Pedro, San Javier, Los Alcázares, Cartagena, La Unión, Mazarrón y Águilas. En estas siete localidades los ciudadanos solo podrán salir de sus casas por motivos «laborales, asistenciales y de aprovisionamiento de alimentos y farmacias».
Esta medida, que tendrá una vigencia de 14 días, está motivada por la llegada masiva de ciudadanos provenientes de Madrid, la región con el mayor número de afectados del país. «Estamos viendo comportamientos que nos ponen en peligro a todos. Hay una larga serie de personas que se han tomado la cuarentena como unas vacaciones en la costa murciana. La imagen es lamentable e irresponsable», refiriéndose a personas que han aprovechado el cierre de los colegios para salir unas semanas fuera de la capital.
Demasiado tarde reaccionó. Medio mundo le aconsejó hacerlo antes de perder control. Hasta que Irene Montero dio positivo empezó a pensar en tomar cartas.