Se trata de un exmiembro de la Marina de Tailandia, que pereció este viernes luego de quedar sin oxígeno, tras haber ayudado a los niños atrapados desde hace trece días en una cueva inundada del norte de ese país, un golpe duro para los socorristas que participan en las labores de rescate.
El rescate de los niños se ha cobrado la primera vida: la de un marine que salía para buscar más reservas de oxígeno y que, paradójicamente, sin ese necesario aire se ha quedado. Ante esta percance, el Comandante del Ejército de Tailandia, Arpakorn Yookongkaew, dijo que «No hemos entrado en pánico, vamos a seguir con nuestra misión, no ha perdido su vida en vano».Sacarlos buzeando era la opción principal pero la cosa se pone cada vez mas difícil, por lo que se les están dando cursos intensivos de natación pero tienen que atravesar una zona en forma de u, llena de sedimentos, barro y fuertes corrientes que hace peligrosísimo el recorrido.
Este ex miembro de los comandos de la Marina tailandesa «perdió el conocimiento en el camino de vuelta, su compañero de buceo intentó ayudarle y llevarlo», precisó el jefe de los comandos de la Marina.
El socorrista fallecido fue identificado como Samarn Kunan, de 38 años.
La tragedia recuerda la dificultad del camino que hay que recorrer, bajo el agua, hasta llegar a los doce niños y su entrenador de fútbol, bloqueados en esta cueva inundada.
Los socorristas trataban el viernes de avanzar al máximo en sus preparativos de evacuación antes de que retorne la lluvia, según las previsiones.
Esperan poder, con ayuda de bombas, que el nivel del agua baje a tiempo lo suficiente como para que los niños puedan salir de allí sin tener que bucear o haciéndolo en momentos contados.
