Las autoridades mexicanas suspendieron de forma temporal las operaciones de Global Air, la aerolínea propietaria del Boeing 737 accidentado el pasado viernes en Cuba en el que murieron 111 de sus 113 ocupantes, mientras se realiza una investigación de lo sucedido.
«Se está notificando a la empresa la suspensión temporal de actividades en tanto se lleva a cabo la verificación», explicó la Dirección General de Aeronáutica Civil en un comunicado.
Asimismo, informó que Global Air, registrada bajo el nombre de Aerolíneas Damojh, ya había sido suspendida de sus actividades en 2010 y en 2013.
En 2010 se canceló temporalmente la autorización para operar después de que uno de los aviones de la compañía tuviera que aterrizar de emergencia en la localidad turística de Puerto Vallarta debido a un problema en el tren de aterrizaje.
En 2013, después de las quejas del piloto Marco Aurelio Hernández, se abrió una investigación que llevó a que Damojh tuviera que interrumpir sus actividades durante dos meses.
El aparato siniestrado este viernes cayó a tierra al poco de despegar de La Habana con destino a Holguín en un vuelo operado por Cubana de Aviación.
Todavía se desconocen las causas de la catástrofe que conmocionó a los cubanos y sobre la que las autoridades de la isla abrieron una investigación.
Se espera que el hallazgo de una de las cajas negras, que se reportó que se encuentra en buen estado, pueda servir para esclarecer qué falló.
Dos pilotos que habían tenido contacto con la aeronave declararon el día después de que se estrellara que habían reportado fallos de seguridad y quejas contra la compañía propietaria. Uno de ellos fue Marco Aurelio Hernández, cuyas denuncias en 2013 llevaron a la interrupción de actividades de la empresa.
Las autoridades de aviación de Guyana habían negado al Boeing siniestrado el permiso para volar sobre su territorio después de que detectarán en él varias anomalías.