Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) abordarán este lunes la crisis de seguridad entre Rusia y Ucrania en su Consejo mensual, al que han invitado a su homólogo ucraniano, Dmitro Kuleba, mientras mantienen su unidad sobre la necesidad de sancionar a Moscú si ataca a su vecino, con medidas que están ya preparadas.
”Llevamos semanas trabajando en posibles sanciones en caso de que Rusia emprenda acciones en Ucrania o en otro lugar de Europa, poniendo en peligro nuestra seguridad”, indicó un alto funcionario europeo esta semana, de cara a la reunión de los ministros de este lunes.
Aunque no se espera que los ministros europeos aborden esas medidas restrictivas durante su encuentro, están ya preparadas y podrían entrar en vigor rápidamente en caso de que se dé una acción que las motive.
En paralelo, están considerando sancionar a Bielorrusia si participa en un ataque ruso a Ucrania, según la fuente europea, teniendo en cuenta que Moscú ha emplazado en territorio bielorruso tropas próximas a la frontera ucraniana.
En todo caso la UE insiste, al igual que sus socios occidentales, en su apuesta por la diplomacia y que la crisis pueda resolverse por medios políticos, aunque ha dejado claro que los principios sobre los que se asienta la seguridad en Europa no son negociables, incluido el derecho de todo país, como Ucrania, a elegir sus alianzas.
Debilitar economía rusa
Desde la Conferencia de Seguridad de Múnich (Alemania), la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ya dijo este sábado que la UE tiene dispuesto un fuerte paquete de sanciones y que una agresión tendría para Rusia consecuencias “económicas, políticas y geoestratégicas”.
”Realmente debilitarían la economía rusa”, indicó la fuente comunitaria, que aseguró que las medidas han sido coordinadas con “países de mentalidad parecida que tomarían acciones similares en ese caso”: se aplicarían “las mismas medidas, al mismo tiempo, con la misma intención”, apuntó.
”Nuestra estrategia es mostrar claramente a Rusia que pagará un precio muy alto si lleva a cabo cualquier agresión sobre el terreno contra la seguridad europea”, agregó.
Pero, al mismo tiempo, unas sanciones de tal envergadura también serían “dolorosas” para la UE, tal y como reconocieron otras fuentes europeas esta semana, especialmente por cómo afectarían al ámbito energético.
Aproximadamente, un 40 % del gas que importa la UE procede de Rusia.
Von der Leyen explicó en una entrevista con Efe y otras agencias esta semana, desde la sede de la Eurocámara en Estrasburgo (Francia), que la Comisión ha mantenido contactos con “otros proveedores de confianza de gas”, principalmente de gas natural licuado, como Estados Unidos, Catar, Egipto, Azerbaiyán o Nigeria, para que incrementen su oferta a la Unión Europea.
Según dijo, también se ha hablado con “grandes compradores” de gas natural licuado para pedirles intercambios de contratos en favor de la UE.
Además, países como Japón ya han mostrado su disposición a enviar a la UE parte de sus reservas de gas natural licuado en caso de que Rusia bloquee sus exportaciones a territorio comunitario como represalia por posibles sanciones.
Pretexto para atacar
Entre tanto, la UE ha expresado su preocupación por el uso de armas pesadas y los bombardeos indiscriminados en áreas civiles del Donbás, la región del este de Ucrania controlada por milicias separatistas prorrusas.
Los socios europeos han asegurado que no hay motivos para las acusaciones procedentes de esa zona sobre un posible ataque ucraniano, según indicó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, el sábado en una declaración en nombre de los Veintisiete.
El jefe de la diplomacia comunitaria recalcó que la UE está “extremadamente preocupado” porque “los eventos escenificados, como se señaló recientemente, puedan usarse como pretexto para una posible escalada militar”.
Aseguró que la UE “también está presenciando una intensificación de los esfuerzos de manipulación de la información para apoyar tales objetivos”.
Para la UE, Rusia viene mostrando desde hace años un “patrón de comportamiento” en muchas crisis, y en la actual con Ucrania “estamos viviendo una situación aguda de esto, concentrando tropas en la frontera, dispuestas claramente de manera que se puede interpretar fácilmente que están listas para atacar”, comentó la fuente comunitaria.
“Lo que es nuevo es el nivel de amenaza, y que esté mezclado con peticiones sobre la seguridad europea”, agregó.
Antes de iniciar el Consejo, los ministros celebrarán un desayuno con Kuleba, con el que podrán abordar de primera mano la situación en Ucrania.
con la tecnologia actual y la escondida en todo, desde carros hasta agricultura. La palabra sanciones suena como hecharse tierra uno mismo si no saben que cartas tiene el oponente al otro lado dela mesa.