Autoridades sanitarias advierten que Estados Unidos puede enfrentar una nueva ola de contagios. El país ha registrado 57 mil infecciones diarias, un aumento del 7% en el número de casos confirmados con respecto a una semana atrás.
Los hospitales han registrado 47,00 pacientes diarios en estados como Nueva York y Nueva Jersey, que fueron epicentro de la pandemia el pasado verano boreal, vuelven a encabezar las listas de nuevos contagios.
El 71,8% de los estadounidenses mayores de 65 años han sido vacunados, esta nueva ola podría ser diferente, con menos hospitalizaciones y sobre todo menos muertes, según prevén las autoridades.
Rochelle Walensky, directora de los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) ante una rueda de prensa en la casa Blanca mencionó, que de todas maneras se preocupa de ver una nueva ola de contagios, que se pudiera evitar si se mantienen hábitos básicos como el constante lavado de manos, la distancia social, el uso de máscaras y los exámenes frecuentes.
El Dr. Anthony Fauci, principal epidemiólogo en el país, mencionó el pasado domingo en el programa Good Morning America, que pronto se podría empezar a ver un resurgimiento en el número de casos.
El alza de la última semana en el número de contagios es el primer indicio de este tipo que se ve en dos meses, en los que semana a semana la curva iba descendiendo. 22 estados vieron un alza de al menos 10 por ciento en el número de nuevos casos detectados en la última semana. Las hospitalizaciones, si bien no subieron, vieron por primera vez un freno en su curva de descenso. El número de pacientes internados a consecuencia del virus disminuyó un 70 por ciento desde enero en Estados Unidos.
Otra preocupación es que con el fenómeno de más casos, también se han visto menos pruebas. Es decir, un menor número de personas se ha hecho la semana pasada el examen del COVID 19. A nivel nacional, el número promedio de pruebas de coronavirus disminuyó un 12,2 por ciento, mientras que el porcentaje de positivos aumentó entre un 4,2 y un 4,8 por ciento. Con menos personas haciéndose el examen, los estados temen que el número real de contagiados sea más amplio de lo que se cree, preocupando sobre todo los casos asintomáticos que pueden convertirse en grandes contagios.
En estados como Illinois se determinó que el alza de casos se da entre personas de entre 18 y 29 años, haciendo pensar que es una consecuencia de que parte de la población considera que el peligro mayor ha pasado y está dejando atrás los hábitos de protección contra el virus.