Tras el estreno de la última temporada de Stranger Things, muchos fans se sorprendieron al descubrir que la actriz que interpretaba a Chrissy, Grace Van Dien, era una streamer de Twitch.
Conocida como BlueFille, jugaba a menudo al Valorant y Fortnite en directo. La noticia consiguió que su popularidad en la plataforma se triplicara y actualmente tiene casi 300.000 seguidores.
Aun así, muchos pensaban que los directos suponían un entretenimiento durante su trabajo como actriz. Sin embargo, Grace ha confesado que desea centrarse más en su faceta como streamer y rechazar papeles de cine.
«La verdad es que no he tenido muy buenas experiencias con las últimas personas que he trabajado», ha revelado muy apenada Grace. Uno de los productores la pidió que hicieran un trío. «Ese es el tipo de jefes que tenía», se ha lamentado.
«Me quedé llorando y muy enfada», ha reconocido, y por eso, prefiere seguir en Twitch donde decide con quien habla y con quién pasa el tiempo. Muy descontenta, ha asegurado que ha rechazado hasta cuatro papales.
Ha decidido dar un paso adelante y hablar sobre este acoso sexual para responder a todos esos fans que estaban enfadados de no verla en más proyectos cinematográficos.
«Me preguntabais como era posible que hacer directo fuera mejor para mi salud mental que trabajar. Es por esto», ha continuado: «Me puedo quedar en mi casa jugando a videojuegos y así no tengo que soportar a ningún jefe pidiéndome que me acueste con ellos».
«Estoy contenta aquí y estoy creando mis propios proyectos», ha concluido: «Estoy a la espera de que alguien decida financiarlos para poder estar en control de mi propio set».