La Policía ha detenido a 121 personas, 118 hombres y tres mujeres, en una de las operaciones más importantes desarrolladas en España contra la pornografía infantil, en la que se han llevado a cabo 125 registros y se han intervenido 946 dispositivos con 500 terabytes de contenido pornográfico protagonizado por menores.
Durante los registros efectuados en los domicilios o puestos de trabajo de los arrestados se han intervenido 368 discos duros, 427 CD y DVD, 114 memorias usb, 37 tarjetas de memoria, 60 ordenadores, 47 teléfonos móviles, seis tabletas, una videocámara y otros dispositivos electrónicos, ha detallado en un comunicado la Policía Nacional.
Todo el material intervenido en el operativo se encuentra sometido a un análisis técnico policial, en busca de nuevas evidencias que permitan continuar gestiones de investigación para identificar nuevas víctimas de abuso sexual o contactos de los detenidos que conformen una red de pederastas.
La investigación se inició por agentes de la Unidad Central de Ciberdelincuencia dentro de las labores preventivas de ciberpatrullaje para lucha contra las redes pedófilas que comparten archivos de material de abuso sexual infantil a través de la web. La operación ha requerido la participación de 46 unidades territoriales de agentes especializados en ciberdelincuencia.
Los 121 arrestados hacían uso de la misma plataforma digital para obtener y compartir el contenido ilícito. Uno de los arrestos, llevado a cabo en Madrid, permitió intervenir a un varón más dos millones de archivos de graves abusos sexuales cometidos sobre niñas de muy corta edad.
Muchos de los vídeos se caracterizaban por el alto grado de violencia empleado sobre las víctimas y se encontraban repartidos en diez discos duros de gran capacidad. En uno de los registros llevados a cabo en Alicante, los agentes arrestaron a un varón que poseía gran cantidad de archivos multimedia que contenía imágenes sexuales explícitas de dos varones menores de edad. Durante el análisis de los archivos, los investigadores se percataron de que el material había sido grabado en el interior de la vivienda del arrestado.
Los juzgados encargados de la instrucción de las causas abiertas determinaron el ingreso en prisión para dos de los detenidos en Cáceres, así como para otro de los arrestados en Almería, por la cantidad de contenido localizado en su posesión, llegando uno de estos detenidos a un acuerdo de conformidad por cinco años de prisión por un delito de posesión y distribución de material de explotación sexual infantil.
Son enfermos mentales, no deben de ir a la cárcel;, sino al hospital psiquiátrico