La fecha prevista para su comienzo era el próximo 10 de febrero pero la defensa de Ryan Routh solicitó a la jueza federal Aileen Cannon retrasarlo hasta diciembre del año entrante, dada la “magnitud” del caso y que aún resta analizar información de 18 teléfonos celulares, tres computadoras, tres tablets y cinco discos duros.
“El extraordinario volumen de pruebas ha hecho que el calendario actual del juicio sea incompatible con los derechos al debido proceso del señor Routh”, señaló su equipo legal en la moción al solicitar esta “prórroga razonable”.
Tras evaluar el pedido, la magistrada reconoció que sería apresurado dar inicio al proceso en febrero y definió el 8 de septiembre de 2025 como fecha para que Routh sea juzgado en Fort Pierce. Este nuevo día es casi un año después del intento de asesinato en Palm Beach, el 15 del mes.
Entonces, Routh ingresó en un campo de golf propiedad de Trump mientras jugaba, se escondió entre arbustos y apuntó contra él con un rifle semiautomático. El Servicio Secreto lo identificó a tiempo e impidió que disparara.
Enseguida, se dio a la fuga pero fue arrestado poco más tarde y puesto bajo custodia policial.
Formalmente, se lo acusa de cinco cargos federales, entre ellos posesión de arma de fuego, posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado e intento de asesinato de un importante candidato presidencial, algo que él mismo reconoció en una carta encontrada por los investigadores entre sus pertenencias.
“Fue un intento de asesinato contra Donald Trump pero fallé. Hice todo lo que pude y le eché todas las agallas que pude. Ahora depende de ti terminar el trabajo… ofreceré 150.000 dólares a quien pueda completar el trabajo”, escribió en la nota, según los fiscales, aunque luego se desdijo ante los magistrados, al declararse inocente.
De ser encontrado culpable, Routh podría ser condenado a una cadena perpetua.
A estos cargos, sin embargo, se sumó un sexto recientemente, que podría complicar todavía un poco más su situación ante la Justicia.
El pasado miércoles, la fiscal de Florida Ashley Moody presentó otra acusación en su contra producto de un accidente de tráfico que ocurrió en el marco de su detención.
Aquel día, luego de que se cerrara la autopista interestatal para que los agentes estatales y federales pudieran detenerlo, una menor de seis años resultó “gravemente herida”. Ante esto y dada la naturaleza criminal de la conducta de Routh, la Fiscal consideró que cabía interponer un nuevo cargo de intento de asesinato por delito grave.
Gracias al trabajo de los investigadores se conoció que el acusado ya contaba con un extenso pasado criminal y una postura política que generó polémica en reiteradas oportunidades en el pasado. Por ejemplo, años atrás intentó reclutar a combatientes para ir a luchar a Ucrania y defender al país de Rusia y, más recientemente, había manifestado su apoyo y luego desdén por Trump, incluso instando a Irán a matarlo.