Doce viviendas amanecieron marcadas con «+ ELN» y un panfleto del Ejército de Liberación Nacional. No hacía falta mayor explicación. Es una amenaza de muerte contra 11 dirigentes opositores y un sacerdote del municipio Junín, del estado Táchira, con la advertencia de que ellos y sus familias están sentenciados si acuden al llamado que hizo el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, de salir a marchar el 1 de mayo.
Las marcas del ELN llegaron a la iglesia «Santa Lucía» en el sector Santa Bárbara de Rubio, contra el sacerdote Richard García. Los otros amenazados son Mariela Betancourt, una profesora y activista en defensa de los derechos de los ciudadanos, del Frente Amplio y del partido Acción Democrática; Jacson Carrillo, quien fue candidato de la oposición en las pasadas elecciones municipales, dirigente de Copei y es profesor; Osmey Correa es el prefecto del municipio y profesor universitario; Francisco Gamboa, quien ha sido dirigente de la oposición, ex director de la alcaldía, ingeniero, profesor de la Universidad Experimental del Táchira y coordinador municipal de Primero Justicia; Ana Velazco, reconocida líder de Voluntad Popular y profesora; Grey Hernández, un destacado activista político y profesor universitario; Valentín Durán, docente y dirigente de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (Upel) y directivo del Frente Amplio; Danny Carrillo, quien se destacó desde que asumió la concejalía, Josué Córdoba, un dirigente de Copei, bastante persistente en las protestas. Y a quien identifican en el panfleto como «Izaac resistencia» es un dirigente de la juventud.
El Obispo del Táchira, monseñor Mario Moronta, respondió a las amenazas contra el sacerdote de su comunidad pastoral y los panfletos. «Con estupor y gran preocupación hemos recibido la noticia de unos volantes amenazadores contra algunos ciudadanos, entre los cuales se encuentra un sacerdote, el párroco de Santa Lucía en Rubio. En dichos volantes, presuntamente firmados por el ELN, se amenaza de muerte a los en él nombrados y son declarados objetivo militares. Todo por el hecho de disentir de las políticas del Ejecutivo Nacional y sus seguidores».
Destaca que algunas otras personas, vinculadas a una ideología política, podrían estar detrás del hecho. Califica como «sumamente grave, pintar con una cruz y las iniciales ELN, casas donde viven esos ciudadanos y hasta el templo de Santa Lucía».
Hace referencia a lo que se creían etapas superadas del nazismo de Hitler. «Eso mismo sucedió también en San Antonio del Táchira».
Considera que ello habla de «la indefensión a la que estamos sometidos todos los ciudadanos de Venezuela y particularmente del Táchira». Se pregunta dónde están las autoridades militares, cuyo principal objetivo es la paz, la defensa de los ciudadanos y la soberanía territorial del país.
Hace un llamado a estar atentos y a no permitir que «nos secuestren la ya tan golpeada paz ciudadana». Advierte que la Iglesia no se dejará intimidar «ni se dejará llevar por el miedo ante amenazas de ningún tipo. Al contrario, seguirá al lado de todo el pueblo, especialmente de los que más sufren».
Hizo responsable de lo que ocurra a los amenazados en el panfleto, a quienes tienen el irrenunciable deber de defender la soberanía, la vida de los ciudadanos y la convivencia pacífica de todos los tachirenses y venezolanos.
Esta es una prueba palpable del apoyo que le da el gobierno de Maduro a las guerrilas colombianas. Y saben que el caer este gobierno ya no lo tendrán
Otro falso positivo mas para usarlo de caballo de troya y justificar la injerencia foranea de frente a la falla de todos los metodos ya usados. Solo un loco ignorante se cree esa paja.