El gobierno de Venezuela confirmó el arresto de un periodista de un sitio web independiente, casi una semana después de la denuncia del medio.
Rory Branker, periodista de “La Patilla”, habría sido arrestado por funcionarios de inteligencia en Caracas. Posteriormente un grupo de uniformados, sin orden judicial, allanó su residencia, de donde sustrajeron dos computadoras portátiles, de acuerdo a una publicación del medio.
“Alberto Ravell -propietario del sitio web- está muy preocupado por Rory Branker, el periodista de La Patilla que fue capturado por extorsionar a personas mediante publicación de información falsa y otros delitos más. Como venganza, Ravell está moviendo sus antiguos tentáculos para montar matrices comunicacionales contra el gobierno”, de acuerdo con una carta que leyó en su programa de los miércoles el ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello.
“Ravell debe rendir cuentas por todo el dinero que manejó cuando estuvo al frente del Centro de Comunicación Nacional durante el llamado interinato, también debe explicar cómo vivía de lo que le daba la USAID”, continuó.
En su programa “Con el Mazo Dando”, transmitido los miércoles por el canal del Estado, Cabello usualmente lee textos que presenta como cartas enviadas por “patriotas cooperantes”, un término que usa el gobierno para referirse a informantes anónimos.
El Colegio Nacional de Periodistas seccional Caracas advirtió el jueves que a pesar de la confirmación de Cabello, todavía no se ha podido conocer el paradero o el estado de salud de Branker.
La madre de Branker, Cheryl Ann Branker, exigió saber dónde se encuentra su hijo. “Esto me está matando, por favor”, dijo en un vídeo divulgado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
Reporteros Sin Fronteras (RSF) pidió este miércoles la inmediata liberación de todos los periodistas arrestados arbitrariamente en Venezuela, así como el cese de la persecución judicial contra trabajadores de la prensa.
Los arrestos de periodistas en Venezuela han aumentado tras las elecciones presidenciales del 28 de julio del año pasado. Muchos de ellos fueron acusados por presuntos delitos de terrorismo e incitación al odio.
Más tarde el Ministerio Público hizo una revisión de los casos de decenas de personas privadas de libertad en el contexto postelectoral, entre ellos algunos periodistas, que fueron excarcelados. Sin embargo, sobre ellos pesan restricciones judiciales como régimen de presentación, prohibición de salir del país o de referirse a sus casos en público.
Según el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) de Venezuela, al menos 9 periodistas siguen arrestados en el país.
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