El director de cine canadiense Norman Jewison, autor de cintas como ‘Moonstruck’ (‘Hechizo de luna’) e ‘In the Heat of the Night’ (‘En el calor de la noche’), falleció a los 97 años de edad, informó este lunes The Hollywood Reporter.
Con él trabajaron actores inmensos como Al Pacino, Tony Curtis, Sideny Poitier, Michael Caine o Denzel Washington, y otros tremendamente populares como Cher, Bruce Willis, Whoopi Goldberg, Robert Downey Jr. y Steve McQueen. Comprometido con la defensa de los derechos civiles, fue uno de los últimos directores modernos que empezó su carrera en la década de los 50.
La revista especializada precisó que el cineasta murió el sábado en su residencia de Los Ángeles (EE.UU.), según su publicista, Jeff Sanderson.
La carrera de Jewison también atesora títulos como ‘The Thomas Crown Affair’ (‘El caso de Thomas Crown’) y musicales como ‘Fiddler on the Roof’ (‘El violinista en el tejado’) y ‘Jesus Christ Superstar’ (‘Jesucristo superstar’).
Moonstruck’ y ‘Fiddler on the Roof’ le valieron una cuádruple nominación al Óscar en 1988 y 1972, respectivamente, a mejor película y mejor director.
Jewison estuvo nominado otras tres veces: a mejor filme por ‘A soldier’s story’ (‘La historia de un soldado’, 1985) y por ‘The Russians Are Coming, the Russians Are Coming’ (‘¡Que vienen los rusos!’, 1967) y a mejor cineasta por ‘In the Heat of the Night’ (1968), cinta que ganó el Óscar a la mejor película.
En total, sus películas se hicieron con 46 nominaciones y 12 Óscars.
Canadiense nacido en 1926 y veterano de la Segunda Guerra Mundial, Norman Jewison se gradúa en la Universidad de Toronto y se forma en lo audiovisual en la televisión canadiense y, después, en la británica, donde logra una buena reputación. Consigue debutar como director en Estados Unidos con la comedia Soltero en apuros en 1962, protagonizada por Tony Curtis, logrando críticas favorables. Sus películas posteriores son amables comedias románticas con Doris Day, Rock Hudson o Steve McQueen hasta que en 1967 da paso a la vida adulta como director con la película En el calor de la noche, un drama racial que se hace con cinco Oscars, entre ellos el de mejor película, actor principal (Rod Steiger) y guion adaptado y por el que él está nominado al mejor director.
El cambio de década le lleva a dirigir películas de diferentes géneros y todas ellas importantes, como la película de robos El caso de Thomas Crown (1968), la comedia Los locos años de Chicago (1969) o el musical de temática judía El violinista en el tejado (1971). Pero la película con la que de verdad deja una huella indeleble en la cultura pop es la adaptación del musical de Broadway escrita por Andrew Lloyd Webber y Tim Rice, Jesucristo Superstar (1973). Rodada en Israel y Oriente Próximo, la poderosa película que versiona la famosa ópera rock en que aparecen hippies, autobuses, un Judas Iscariote negro y cuyo disco vendió más de veinte millones de copias en todo el mundo, es un hito en la historia del cine que no estuvo exenta de cierta controversia.
Aunque sigue dirigiendo películas durante los siguientes diez años como Justicia para todos (1979) o Agnes de Dios (1985), saltando siempre, con comodidad, de un género a otro, su segundo éxito más comercial se lo trae la espléndida comedia romántica Hechizo de luna (1987) por la que Cher ganaría el Oscar a la mejor actriz y por la que él volvería a estar nominado al mejor director. Realizada justo antes de la eclosión de las comedias románticas en la década de los 90, su influencia en ellas es innegable.
Si cada década había traído a Jewison una película icónica por diversas razones, la de los 90 no fue menos, pues con Huracán Carter no sólo volvió a demostrar un compromiso y una sensibilidad especial con las historias de desigualdad hacia los afroamericanos, sino que fue por la que Denzel Washington consiguió unas de las mejores críticas de toda su carrera que le valió una nominación al Oscar al mejor actor. Con esta película cerraba oficiosamente una carrera empezada treinta años antes con El calor de la noche, filme con el que está naturalmente hermanada.
Productor de la mayor parte de todas sus películas, también fue un importante productor de televisión y no sólo de las Tv Movies que dirigía sino también de importantes programas como el The Judy Garland Show durante los dos años que estuvo en antena y que fue uno de los programas más vistos de la televisión americana.
Precisamente, en 1999, la Academia de Cine reconoció su labor como productor otorgándole el premio Irving Thalberg en cuyo discurso de agradecimiento se lamentó, jactancioso, de que no viniera acompañado, como el Nobel, de una dotación económica.
Se retiró del cine sólo cuatro años después dirigiendo a Michal Caine en el thriller sobre el nazismo La sentencia, que recibió críticas severas. Un cierre amargo para una carrera impecable.
Que Jesucristo te haya perdonado, tu personaje, no fue más que un payaso.