El Vaticano publicó una actualización sobre la salud del papa Francisco en la tarde del martes, informando que el pontífice tiene “neumonía bilateral”.
En un comunicado, el Vaticano dijo que el estado clínico del Papa se considera “complejo”, pero se mantiene de buen humor.
La tomografía computarizada de tórax a la que se sometió el Santo Padre, prescrita por el equipo sanitario vaticano y por el equipo médico de la Fundación Policlínico ‘A. Gemelli’, demostró la aparición de neumonía bilateral que requiere terapia farmacológica adicional.
“La infección polimicrobiana, ocurrida en un contexto de bronquiectasia y bronquitis asmática, y que requirió el uso de terapia antibiótica con cortisona, hace que el tratamiento terapéutico sea más complejo”, precisó el comunicado.
“Los análisis de laboratorio, la radiografía torácica y la condición clínica del Santo Padre continúan presentado un cuadro complejo”, concluyó el Vaticano.
Francisco fue hospitalizado el viernes pasado para tratar una bronquitis persistente, y sus compromisos fueron anulados hasta este fin de semana.
Pese a los reiterados problemas de salud de los últimos años, entre ellos de cadera, dolores en la rodilla que le obligan a ir en silla de ruedas, operaciones o infecciones respiratorias, el argentino Jorge Bergoglio ha mantenido una cargada agenda y declaró que no tenía intención de bajar el ritmo.
Su hospitalización, la cuarta en menos de cuatro años, ha relanzado el debate sobre su salud, especialmente porque su ingreso llega al inicio del año jubilar de la Iglesia católica, lo que implica una larga lista de eventos, muchos de ellos presididos por el Papa.