El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, tiene un tumor que se encuentra avanzado y con metástasis, lo que se conoce como en «estadio IV», afirmaron al medio uruguayo Búsqueda fuentes médicas y políticas.
En diálogo con el semanario citado, uno de los médicos consultados afirmó que lo expandida que está la enfermedad significa que «inicialmente» se encuentra «fuera de oportunidad quirúrgica pretendidamente curativa».
Desde su entorno igualmente afirman que el jefe de Estado se siente bien, con muy buen ánimo y dispuesto a someterse al tratamiento indicado por los profesionales que lo atienden.
«Lo vi bien, se está tratando con intensidad. Me dio una clase sobre sistemas de defensa y capacidad inmunológica que tenemos. Es una paradoja que alguien que dedicó 40 años de su vida a la lucha contra el cáncer tenga que pelear contra esta enfermedad», afirmó ante la prensa el ex presidente José Mujica luego de una reunión que mantuvo con Vázquez esta semana.
«Sin embargo, lo vi con un tono muy optimista, con ánimo y compromiso para este viaje y lo que viene», agregó.
Por su parte, el prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo, señaló que el mandatario «está muy activo, como siempre, teniendo sus reuniones habituales. Las que ven en los medios y las que no». Lamentó la información publicada por Búsqueda y agregó que la misma «se contradice» con los informes médicos. Sin embargo, desde el semanario ratificaron la información ante una consulta de Infobae.
El pasado 20 de agosto, Vázquez anunció que le fue detectado un nódulo pulmonar con «características muy firmes».
«En el marco de los estudios médicos que me realizo de manera regular y periódica, en este último reciente, en un estudio tomográfico se me comprobó la existencia de un nódulo pulmonar derecho con características muy firmes de que se puede tratar de un proceso maligno», detalló el mandatario uruguayo ese día. Luego se confirmó que el tumor es maligno.
Durante su primer mandato, Vázquez impulsó una serie de medidas para combatir el consumo del cigarrillo, que le valieron una demanda al Estado uruguayo por parte de la tabacalera Philip Morris. El proceso iniciado en febrero de 2010 tuvo un fallo del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) a favor de Uruguay en 2016, rechazando la pretensión de la tabacalera de ser indemnizada por 25 millones de dólares.
El mandatario transformó a Uruguay en el primer país latinoamericano y el quinto del mundo en ser libre de humo de tabaco en los lugares públicos. También dispuso la colocación de pictogramas de advertencia en el 80% de los paquetes e impidió el uso de expresiones engañosas como «cigarrillos light». Además, prohibió la publicidad de cigarrillos, aumentó los impuestos al tabaco y obligó a las obras sociales a ofrecer planes de cesación.
Las medidas fueron elogiadas por la Organización Mundial de la Salud y por activistas antitabaco y el caso fue un precedente para la imposición de mayores restricciones al tabaco en todo el continente. De hecho, en 2018, la OMS lo premió en agradecimiento por su intenso trabajo para reducir los índices de tabaquismo en Uruguay.