El presidente de la Sociedad Española de Inmunología, Marcos López Hoyos, advirtió este domingo que el coronavirus es una pandemia “crónica” y “que va a durar” un tiempo prolongado.
Por ello, indicó que “nos tenemos que adaptar” a que el COVID-19 se mantenga en circulación y “tenemos que cambiar nuestro chip de vida”. En ese sentido, consideró que este año “hay que olvidarse” de celebrar la Semana Santa, tal como ocurrió en 2020, cuando las actividades ya estaban paralizadas por las medidas de confinamiento.
“Va a llegar dentro de un mes y pico Semana Santa, vamos a pensar en Semana Santa y hay que olvidarse de la Semana Santa este año. Hay que olvidarse y hay que ya tenerlo claro”, insistió López Hoyos en declaraciones a RNE.
“Es una pandemia crónica, es una pandemia que va a durar y tenemos que mantenernos en ello”, remarcó el experto, que opina que no puede considerarse que se ha salvado el verano ni las navidades porque han seguido falleciendo personas.
No obstante, no todo el panorama trazado por el director científico del Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla (IDIVAL) fue negativo, ya que dijo que es probable que en ese plazo España haya podido controlar la curva de aumento de contagios que atraviesa actualmente.
Aumento de casos y toque de queda en Madrid
El gobierno español enfrenta una gran presión de varias regiones del país que reclaman un endurecimiento de las restricciones ante el virus, pero el ejecutivo se niega alegando que las medidas al alcance de las regiones son suficientes, en un país traumatizado por el estricto confinamiento domiciliario entre marzo y junio pasado.
A partir de este lunes, la comunidad de Madrid ha establecido toque de queda a las 22 y cierre de la hostelería y establecimientos no esenciales a las 21 horas. También se han prohibido las reuniones en domicilios de personas no convivientes, y las mesas en hostelería estarán limitadas a un máximo de cuatro personas.
España supera los dos millones y medio de contagios por covid-19 desde el inicio de la pandemia y se aproxima a los 55.500 fallecidos, según las estimaciones oficiales. Además, la incidencia acumulada del virus se sitúa por encima de los 800 casos por cada 100.000 habitantes, más del triple de los 250 casos por cada 100.000 habitantes considerados de alto riesgo en el país.
La tercera ola de la pandemia que sufre España podría encontrarse ya en su “pico máximo”, según valoró hace unos días el epidemiólogo Fernando Simón, portavoz sanitario del Gobierno español para la pandemia.