Tiger Woods, de 45 años, paralizó al mundo del deporte el pasado martes 23 de febrero tras ser operado de emergencia tras protagonizar un accidente de auto. Ahora su futuro en el deporte es un misterio.
Según pudo averiguar People, el golfista estadounidense le hizo un juramento a su círculo íntimo en las últimas horas. El oriundo de Cypress, California, le manifestó a su novia Erica Herman, su agente Mark Steinberg y a su caddie Joe LaCava, mientras lo visitaron en el centro médico de Los Ángeles, que su carrera “no puede terminar así”.
Woods insistió en que si puede volver a jugar, lo hará. Aunque se siente frustrado por lo acontecido, una fuente le manifestó al mencionado medio que “Si hay alguna forma de que pueda seguir jugando, lo hará”.
El norteamericano, que en el último tiempo peleaba por batir los pocos récords que se le resisten, sabe lo que es resucitar deportivamente, ya que en el pasado se ha sobrepuesto a nueve operaciones de espalda y rodilla, así como a grandes escándalos por infidelidades y otros accidentes viales que le pusieron en el ojo del huracán.
“Este es un gran revés, y él lo sabe, pero ha superado obstáculos en el pasado y cree que puede volver a hacerlo”, remarcó la persona consultada. Y añadió: “Cuando esté lo suficientemente curado, necesitará otros tratamientos, incluida la fisioterapia. Pero es un luchador. Si alguien puede recuperarse de esto, es él”.
El director médico y director ejecutivo interino del Centro Médico Harbor-UCLA, Anish Mahajan, explicó que en su momento Tiger “sufrió importantes lesiones ortopédicas en la extremidad inferior derecha que fueron tratadas durante una cirugía de emergencia por especialistas en traumatología ortopédica”. La tibia y el peroné se le estabilizó insertando una varilla en la tibia, mientras que en las lesiones adicionales de los huesos del pie y tobillo se utilizaron una combinación de tornillos y clavijas.
“Él usó un cinturón de seguridad afortunadamente. De lo contrario, podría no haberlo logrado”, concluyó la fuente que compartió el medio norteamericano citado previamente.
Woods, según explicó el sheriff Alex Villanueva durante una entrevista con la cadena televisiva CNN, no recuerda lo acontecido durante el accidente. Además, abrió una nueva línea sobre el tema sobre la camioneta Genesis GV80 modelo 2021: investigarán la “caja negra” que tienen estos modernos automóviles para saber con precisión qué tan rápido manejaba cuando perdió el control. “Esperamos que esté equipada con la caja negra y así nosotros tendremos información sobre la velocidad, que puede ser un factor en este accidente”, aclaró.
El oficial Carlos González fue el primer policía en acercarse al lugar en el que el vehículo del golfista volcó en la frontera de Rolling Hills Estates y Ranchos Palos Verdes, en Los Ángeles, California. Según el reporte de las autoridades, la colisión se dio a las 7.12 del martes. A las 7.22 un vecino realizó el llamado al 911 y sólo seis minutos más tarde, a las 7.28, ya estaba el uniformado en el lugar. El sheriff Villanueva explicó también que los investigadores no presentarán cargos contra Tiger. “No contemplamos ningún cargo en este accidente. Esto sigue siendo un accidente. Un accidente no es un delito. Ocurren, desafortunadamente”.
Por su parte, el Dr. Kenneth Jung, cirujano ortopédico de pie y tobillo del Instituto Kerlan-Jobe, habló con Los Ángeles Times y explicó que al ser una lesión expuesta “la envoltura de tejido blando, o la piel, también es muy importante. Si no tiene piel que cubra el hueso, realmente no importa cómo se vea o se cure el hueso”. En este sentido, señaló que uno o dos días después de la intervención quirúrgica se revisa el tejido para detectar si hay necrosis o muerte del mismo.
