Dos agentes de la policía de Estados Unidos demandaron el pasado martes al expresidente estadunidense Donald Trump, supuestamente por haber incitado violencia durante una protesta realizada el 6 de enero en el Capitolio de Washington.
Durante el asalto al Capitolio murió un policía, mientras que decenas de otros agentes resultaron heridos en el violento episodio adjudicado por seguidores de Trump.
James Blassingame y Sidney Hemby, quienes presentaron la demanda, dijeron haber sufrido heridas físicas y psicológicas en los enfrentamientos que, según ellos, fueron fomentados por Donald Trump estando aún en la Casa Blanca.
La demanda contra Trump ha señalado que los enfrentamientos fueron incitadas por el comportamiento del ex mandatario, que durante varios meses hizo creer a sus seguidores que estaba a punto de ser sacado a la fuerza de la Casa Blanca por un supuesto fraude electoral.
Dicha demanda ya ha sido presentada en una corte federal de Washington y, además, añade que la horda insurrecta, a la que Trump había animado, entró a la fuerza y sobrepasó a los demandantes y a sus compañeros, persiguiendolos y atacandolos.
Blassingame, quien es un policía afroestadounidense con 17 años de trabajo en el Capitolio, dice que fue herido en la cabeza y la espalda, además de sufrir secuelas psicológicas tras lo ocurrido. Añade también haber sufrido agresiones racistas por parte de los seguidores del entonces presidente de Estados Unidos.
Por otra parte, Hemby, con 11 años en el puesto, alega que tuvo heridas en las manos y rodillas tras ser golpeado contra las puertas del Capitolio, y fue rociado con productos químicos en el rostro y cuerpo durante el ataque. Los dos agentes reclaman en la demanda contra Donald Trump compensaciones de al menos 75 mil dólares cada uno, así como un monto no revelado por daños punitivos que sufrieron durante el asalto al Capitolio.