Al menos 15 personas murieron en violentos disturbios en las dos principales ciudades de Papúa Nueva Guinea, informó este jueves el comisario policial de ese país insular ubicado en el Pacífico.
El oficial David Manning dijo que ocho personas murieron en la capital, Port Moresby, y otras siete en la ciudad de Lae durante las revueltas la noche del miércoles.
La violencia estalló en la capital la noche del miércoles luego de que un pequeño grupo de soldados, policías y guardias penitenciarios lanzaron protestas contra el gobierno.
Multitudes salieron a incendiar comercios y saquear negocios en una noche turbulenta que se propagó a la ciudad de Lae, 300 km al norte.
El primer ministro de Papúa Nueva Guinea, James Marape, prometió el jueves combatir la «anarquía» tras los disturbios.
«Brotes de anarquía no serán tolerados»
Ante ello, Marape ofreció disculpas al país y afirmó que los brotes de «anarquía (…) no serán tolerados».
Afirmó que lo peor de los disturbios ya había pasado para la mañana del jueves, aunque admitió que en partes de Port Moresby «continúa tenso».
Imágenes de AFPTV mostraron los saqueos en la capital, donde personas rompían escaparates y cargaban objetos robados en cajas de cartón, carritos de supermercado y baldes de plástico.
Otras imágenes mostraron edificios y automóviles incendiados, con espesas columnas de humo sobre partes de la capital.
Durante los disturbios, varios comercios chinos fueron atacados, lo que provocó una queja formal de Pekín ante las autoridades de Papúa Nueva Guinea.