El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) de Chile ordenó el martes la evacuación de diversas zonas en el centro del país debido a un incendio forestal que avanza sin control y ya ha quemado más de tres hectáreas de vegetación.
Senapred emitió una alerta roja para toda la comuna de Quilpué, en la turística región de Valparaíso, y, poco después, ordenó la evacuación inmediata de diversos sectores de esta zona, ante el riesgo de que las llamas alcancen las viviendas.
La entidad pidió a los residentes darse prisa pero mantener la calma y acatar las indicaciones de las autoridades, así como no dejar mascotas durante la evacuación.
Por su parte, el Cuerpo de Bomberos informó de que las evacuaciones “están en curso” y pidió a los ciudadanos “circular con precaución y despejar las vías de salida” de la localidad. Agregó que, en los esfuerzos para contener las llamas, trabajan en el local nueve máquinas de Bomberos.
Además de Bomberos de Chile, igualmente auxilian en las labores cuatro equipos técnicos de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), siete brigadas de incendios, dos camiones cisterna, tres aviones y dos helicópteros.
Las autoridades monitorean también “otros focos de incendio” en Quilpué, por lo que equipos de bomberos de otras regiones también se desplazaron a la zona para ayudar a frenar el fuego.
Según el balance inicial, algunas viviendas han sufrido daños, pero las autoridades aún evalúan la cantidad total de hogares afectados, indicó a los periodistas el delegado presidencial provincial, Fidel Cueto.
Los incendios forestales son un problema habitual durante la temporada seca en Chile, que suele extenderse entre noviembre y marzo, ya que la combinación de altas temperaturas y sequedad contribuyen a un mayor riesgo de fuego.
Para esta semana, la Dirección Meteorológica ha advertido de que las fuertes temperaturas que se registran en el norte y centro del país podrían intensificar los incendios y emitió una alerta meteorológica para cinco regiones debido al “calor extremo”, entre ellas, Valparaíso y la región Metropolitana, donde está Santiago.
De acuerdo a la institución, una “circulación ciclónica” en la superficie deberá provocar un aumento generalizado en las temperaturas máximas y los termómetros podrían llegar a superar los 35 grados.
El pasado febrero, un incendio de grandes proporciones dejó a 135 personas fallecidas, más de 21.000 afectados, unas 15.000 viviendas destruidas y consumió más de 8.500 hectáreas en las comunas de Valparaíso, Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana.