El Exorcista, estrenada en 1973 en las salas de Estados Unidos, se convirtió rápidamente en un clásico del cine de terror y hasta la fecha es considerada una de las mejores películas de este género. El film, dirigido William Friedkin, contó con la actuación de la actriz Linda Blair en el papel de Regan MacNeil, la menor de 12 años que es poseída por un demonio.
Blair, quien en 1973 contaba con 14 años de edad, tuvo que recorrer un largo trayecto para llegar a ser elegida como protagonista de este icónico film, el cual volverá a las pantallas de cines en 2021 con un remake, de acuerdo con información difundida por la casa productora Morgan Creek Entertainment, una empresa que tiene detrás varias secuelas de la franquicia de terror.
La elección del director
La película El Exorcista es una producción dirigida por William Friedkin y basada en el best seller del mismo nombre, publicado en 1971 y escrito por William Peter Blatty. Tras el éxito editorial fue Warner Brothers quien se decidió a llevar la historia, inspirada en un exorcismo real ocurrido en Washington en 1949, a la pantalla grande.
Los estudios Warner optaron por elegir a William Friedkin para que dirigiera la ambiciosa película, dada su trayectoria en el cine y su carácter competitivo y perfeccionista. El guion para el proyecto fue realizado por el mismo autor de la novela; William Peter Blatty. Hecho esto Friedkin comenzó a armar su reparto con actores poco conocidos, entre los que figuraban Ellen Burstyn como la madre de Regan, Jason Miller como el padre Karras y el sueco Max von Sydow en el papel del padre Merrin.
El casting para «El Exorcista»
Tras la elección de los personajes principales, aún faltaba por decidir quién interpretaría el papel protagónico, el cual correspondía al personaje de Regan MacNeil. Para la elección del papel de la niña poseída se realizó un casting en el cual participaron 600 menores de edad, entre ellos estaban Laura Dern y Melanie Griffith, sin embargo cabe resalta que ninguna logró impresionar al director.
Finalmente un día llegaron a la oficina de William Friedkin una mujer sin previa cita; había acudido a probar suerte junto con su hija, quien era Linda Blair, quien tenía 12 años y contaba con experiencia en el mundo de la publicidad desde los seis.
Hace dos años, con motivo del 45 aniversario del estreno de El Exorcista, el mismo director, William Friedkin, declararía que desde el momento en que Linda ingresó a su oficina supo que ella sería quien protagonizaría la película.
Friedkin contó durante una entrevista que preguntó a Linda si había leído la novela y si sabía de qué trababa, al o que la menor respondió: “de una niña poseída por el diablo que hace un montón de cosas feas”. Y entre esas cosas feas, “lanza a su madre contra la pared, tira a un hombre por la ventana y se masturba con un crucifijo”, recordó el director.
Finalmente William Friedkin recordó que mientras esto ocurría miraba sorprendido a la mamá de Linda, quien sonreía por las respuestas directas y certeras de su hija; desde ese momento el papel fue suyo. A partir de ese momento la adolescente pasó siete meses en grabaciones intensas, las cuales rindieron fruto pues gracias a la increíble actuación de Linda obtuvo un Globo de Oro como mejor actriz de reparto y recibió una nominación al Oscar en esta categoría.